Un nuevo aliado en Marruecos para la acción social

Fundación SAMU ha firmado recientemente un convenio de colaboración con la Asociación Hanane, una organización de origen marroquí dedicada a la protección de menores con discapacidad y cuya sede principal se encuentra en Tetuán. Las dos entidades han acordado aunar sus esfuerzos dentro del ámbito de sus respectivas competencias para llevar a cabo acciones conjuntas en la ejecución de proyectos tanto en el ámbito público como privado, nacional e internacional, que repercutan en el desarrollo de sus fines.

La Asociación Hanane tiene entre sus objetivos lograr la inclusión social de las personas con discapacidad, promover y difundir la atención temprana en la región de Tánger-Tetuán-Alhucemas, fomentar la educación inclusiva en el sistema educativo nacional, la capacitación e integración laboral de los jóvenes con discapacidad, prestar servicios de educación especial y rehabilitación a niños que presentan un grado de discapacidad severa y profunda, y coordinar y colaborar con las autoridades públicas y los agentes sociales para conseguir la plena inserción social de las personas con discapacidad.

A través de este convenio firmado por Fundación SAMU y Hanane, ambas entidades acuerdan crear equipos de trabajo para el desarrollo de iniciativas y proyectos en las líneas anteriormente mencionadas. También colaborarán en materia de sostenibilidad, accesibilidad universal y desarrollo de iniciativas conjuntas en el ámbito de la economía social.

Para ello, tanto la organización española como la marroquí han acordado el desarrollo de acciones formativas, teóricas y prácticas; el establecimiento de programas de estudio en materia de cooperación internacional al desarrollo, la formación y el voluntariado; y el desarrollo de acciones de difusión de la labor realizada por ambas entidades en pro de la cooperación internacional al desarrollo, la formación y el voluntariado, del empleo y de la inclusión social y laboral de todas las personas, con el fin de que la sociedad conozca las diferentes actuaciones que se llevan a cabo, y que las personas puedan participar en estas iniciativas.

Los principales ámbitos de actuación son la organización conjunta de actividades; la participación conjunta en convocatorias de cooperación internacional y acción humanitaria para África, el Golfo Árabe y Europa; el desarrollo conjunto de proyectos de desarrollo local, participación ciudadana y derechos humanos; la constitución de equipos conjuntos de investigación; la participación en conferencias, seminarios, coloquios, webinars y exposiciones, entre otras actividades académicas; y el intercambio de materiales de investigación, de documentos científicos y pedagógicos y de otras publicaciones.

Este convenio marco fue firmado el 12 de octubre por el presidente-director general de SAMU, Carlos González de Escalada, y el presidente de Hanane, Abdeslam Bakouri. El acuerdo tiene una vigencia de tres años, hasta el 31 de diciembre de 2025, aunque podrá se prolongado anualmente hasta un máximo de cinco años si ambas partes así lo acuerdan cuando llegue el momento.

Melibea Romero, Tcae en la UATE La Esperanza: “Trabajar con menores en Ceuta me ha hecho renacer”

En mayo de 2021, durante la crisis migratoria de Ceuta, Melibea Romero Carmona (La Puebla del Río, Sevilla, 1989) decidió ir de voluntaria junto con otros profesionales de SAMU para asistir a los menores marroquíes que cruzaban la frontera. Más de un año después, continúa trabajando en Ceuta con estos chicos.

—Actualmente trabaja en la UATE La Esperanza, un recurso de acogida para menores extranjeros de Fundación SAMU en Ceuta, pero tengo entendido que también fue alumna de Escuela SAMU, ¿cierto?
—Sí, estudié el Grado Medio en Técnico en Cuidados Auxiliares de Enfermería en Escuela SAMU (promoción 2020-2021), aunque también tengo formación relacionada con la intervención social en drogodependencia y otras adicciones. Y, actualmente, estoy cursando el Grado Superior de Técnico en Integración Social.

—¿Qué recuerda de su etapa en Escuela SAMU?
—Para mí fue un reto estudiar en Escuela SAMU, ya que venía de un mundo laboral completamente diferente. Es una etapa que recuerdo con mucho cariño. La empecé un poco perdida, con miedo e incertidumbre, y me fui encontrando cada vez más cómodo en ella conforme pasaban los meses. Me encantaba ir a la escuela. En ella he reído, he llorado, he aprendido, me he puesto a prueba y he sentido admiración por el trabajo que realizaban mis docentes. En la Escuela SAMU conocí una versión diferente de mí. SAMU te enseña disciplina, te enseña valores, te enseña a trabajar en equipo. Siempre digo que SAMU tiene un veneno que engancha, que te incita a querer ser mejor persona, a cuidar de los demás.

—¿Por qué decidió ir de voluntaria a Ceuta en plena crisis migratoria?
—Cuando la crisis de Ceuta, en mayo de 2021, SAMU activó un gabinete de crisis y yo formaba parte de él. Conforme pasaban los días, veía las imágenes que inundaban los medios, el trabajo que íbamos realizando y las necesidades que iban surgiendo. Sentí que tenía que estar ahí, que era el momento de poder brindarle mi ayuda a todas esas personas. Siempre me ha motivado mucho la labor social, ayudar a otros y, en ese momento, ya contaba con conocimientos para ello. Realmente no me equivoqué al sentir que era el momento idóneo.

—¿Cuál fue su primera impresión cuando llegó a Ceuta?
—Pisé Ceuta por primera vez el 22 de mayo de 2021. Me dio respeto la situación, había muchos menores. Se habilitaron campamentos improvisados, polideportivos, naves. Dormían en literas militares, tenían baños portátiles, se montaron carpas que hacían de comedor… Se hizo todo lo posible para que mil menores pudieran tener las condiciones más optimas posibles dada la situación de emergencia hasta que se encontrara una solución a dicha crisis.

—¿Cuál es su labor en Ceuta?
—Principalmente, hago las funciones de sanitaria. Realizo curas, preparo medicación, intervenciones psicosociales con menores con conductas disruptivas y adicciones, documentación sanitaria, realizo test de antígenos, control y seguimiento de pacientes Covid, bioseguridad, gestión y organización de citas médicas, control y stock de medicación, cuidado y seguimiento de menores y siempre apoyo al equipo educativo.

—¿Cuáles son las principales necesidades que tienen los menores cuando llegan a los recursos de SAMU en Ceuta?
—La mayoría de nuestros menores llegan a través del mar, a nado, por tanto, suelen traer erosiones en la piel de las rocas, quemaduras que les hacen las aletas o los trajes de neopreno e, incluso, a veces llegan en una situación de hipotermia. Ellos siempre llegan con mucha necesidad de atención y reclamo. Es muy novedoso para ellos tener un sanitario en el centro de acogida y, por tanto, tienden a decirte la mínima cosa que les suceda aunque no tenga importancia.

—¿Cuáles son los principales aspectos que trabaja SAMU con estos menores?
—SAMU ofrece una atención integral a los menores. Promovemos una educación basada en una rutina saludable, donde los menores aprenden a tener hábitos tanto de higiene personal como de alimentación, de limpieza, reciben clases de español… El principal objetivo es conseguir la inclusión social de estos menores. Todo este aprendizaje, mientras viven en el centro de acogida temporal, les sirve para tener mayor seguridad a posteriori y que les sea más fácil lograr la integración en nuestra sociedad.

—¿Cuánto tiempo lleva trabajando en Ceuta?
—Llevo trabajando aquí un año y seis meses. He pasado por diferentes recursos de SAMU en esta ciudad autonómica, pero actualmente trabajo en el centro La Esperanza.

—¿Qué es lo que más le gusta de su trabajo?
—Para mí este trabajo ha sido un renacer. He descubierto una vocación que desconocía y que es muy gratificante para mí. Aunque realmente mi trabajo está más enfocado a la parte sanitaria, me gusta implicarme con los menores. Siempre defendí la idea de que el equipo sanitario no curaba y se iba. A los menores hay que observarles, hablar con ellos, saber de dónde vienen, qué sueños tienen… En definitiva, saber quiénes son y con quién estamos trabajando. Al final, esto es lo que hace que lo menores acaben depositando en ti su confianza y, para mí, esto es muy importante porque cuando llega el momento de que estos chicos se marchan del recurso, se acercan a ti y te dicen: “Gracias. Gracias por siempre tener una sonrisa para mí”, “Gracias por todo lo que has hecho por mí”, “Perdona si alguna vez no me porté bien”. Ahí es cuando sabes que tu trabajo ha surtido efecto.

—¿Qué destacaría de la labor que hace Fundación SAMU en Ceuta?
—Destaco la capacidad de reinventarse, ya que desde el año pasado hemos tenido muchos movimientos de menores, tanto en traslados a la Península como en entradas de Marruecos que no esperábamos. SAMU siempre se ha encontrado la manera de adaptarse a todos estos movimientos aunque a veces hayan sido muy urgentes. Y aun así, el equipo humano de SAMU nunca ha perdido de vista que estamos aquí para velar por el bienestar y salvaguardar a todos nuestros menores, independientemente de los contratiempos que surjan.

—¿Qué retos profesionales se planteas a corto y medio plazo?
—Terminar mis estudios de Técnico en Integración Social y seguir creciendo en este camino profesional porque, como he dicho anteriormente, es vocacional.

ISL SAMU Dúrcal: ocio para construir nuevos espacios educativos

El fomento del ocio y el tiempo libre juega un papel fundamental en nuestro desarrollo personal a cualquier edad y en cualquier contexto. La Organización Mundial de la Salud lo considera algo básico para el equilibrio psíquico y social, así como para la mejora de nuestra calidad de vida y nuestro bienestar. En ISL SAMU Dúrcal vamos más allá y nos preguntamos: ¿Puede esto servir de herramienta para la inclusión social de los menores migrantes?

Entender el ocio de manera inclusiva implica entenderlo como un espacio al que pueden acceder todas las personas, interrelacionándose, atendiendo las necesidades de los diferentes grupos, adaptándose y fomentando la diversidad. La socialización en edades tempranas, generalmente, se produce en tres ámbitos diferentes: la familia, la escuela y los espacios sociales informales (amigos, deporte, ocio, actividades culturales…). En el caso de los jóvenes migrantes, que se encuentran alejados de sus familias, es importante potenciar los otros dos aspectos y entenderlos como procesos interrelacionados.
Fomentar la implicación activa de los menores en la comunidad a través del ocio tiene grandes beneficios en el ámbito personal, ya que contribuye al desarrollo de habilidades intelectuales, artísticas, físicas o culturales que se traducen en un aumento de la autoestima y una mejor percepción de ellos mismos.

Por otro lado, las actividades de ocio no solo sirven de apoyo a la educación formal, sino que, además, son actividades propiamente constructoras de espacios educativos. Desde estos espacios podemos trabajar la participación en la comunidad, creando vínculos cotidianos entre las personas locales y migrantes que favorecen la convivencia, teniendo como ejes el respeto y el aprendizaje mediante un intercambio cultural.

El papel de las instituciones

Para el desarrollo de un modelo de ocio inclusivo es fundamental el papel que juegan las instituciones y las medidas políticas, ya que destinar recursos al desarrollo de programas de actividades de este tipo, dar accesibilidad a toda la población, crear canales informativos, facilitar la utilización del espacio público o el trabajo en red entre asociaciones son actuaciones necesarias para poder seguir avanzando hacia un modelo social inclusivo y tolerante.

Desde ISL SAMU Dúrcal estamos en continua búsqueda de aquellas actividades que ofrecen los diferentes recursos de la ciudad para incluirlas en la dinámica diaria de nuestro centro. En este curso escolar 2022-2023 vemos necesario que los menores incluyan en su cotidianidad actividades que les hagan disfrutar y, al mismo tiempo, crear relaciones fuera del recurso.

Como ejemplos concretos, nuestros menores acuden dos días en semana al Centro Deportivo Núñez Blanca a jugar al fútbol, actividad organizada por el centro Cívico del Zaidín, o también hay quienes entrenan con el equipo de fútbol de Dúrcal. Además, participan en actividades de expresión corporal y artística como un taller de break dance, que se imparte desde Granajoven, promovida por la Concejalía de Deportes de Granada; otro de bailes latinos en colaboración con una pequeña escuela del barrio de la Chana, en Granada, y sesiones de skate park los fines de semana con la Escuela KedeKids, en la zona de Bola de Oro en Granada.

A nivel interno, fomentamos actividades que trabajen el desarrollo de herramientas en los menores de cara a su independencia y autonomía. Por ello, trabajamos en actividades de cara a su emancipación, realizando talleres que van desde el desarrollo de habilidades domésticas, sociales y emocionales o simplemente para darles a conocer nuevas formas de entretenimiento.

Algunos ejemplos de actividades recientes que fomentan su emancipación son los talleres de cocina, búsqueda de piso y empleo, seguridad vial, talleres sobre ofimática, cuidado del huerto… También tenemos talleres sobre educación sexual, expresión emocional o autoconocimiento. Y por último, más dirigidos al ocio, cuentan con talleres sobre fotografía, introducción a nuevos deportes como la calistenia o el pádel, rutas de senderismo por la provincia de Granada o video-fórum semanales.

El desarrollo de estas actividades internamente permite también crear vínculos dentro del centro, sin limitarnos únicamente a las tareas formativas o de mantenimiento del recurso. Así, creamos un espacio más distendido e informal que nos permite un mayor acercamiento a los menores a la vez que trabajamos los objetivos establecidos.

Por MARINA TORAL FAJARDO.
/Auxiliar Técnico Educativo ISL SAMU Dúrcal

Classcraft: juego de fantasía para aplicar en la realidad

Durante el verano, en ARB SAMU Motril decidimos dejar a un lado las tradicionales clases de español y sumergirnos junto a los menores en un mundo virtual en el que el trabajo en equipo es la principal estrategia para alcanzar la victoria. Se trata del juego Classcraft, una herramienta que se desarrolla a través de una plataforma digital y permite llevar a cabo diferentes dinámicas, tareas y actividades educativas. Todo ello enmarcado en un mundo de fantasía y roles.

Para hacer posible el inicio del proyecto, dividimos en varios grupos a los menores. En cada uno de estos grupos se asignaron diferentes roles que eran imprescindibles para la supervivencia del equipo dentro de la plataforma. Entre ellos se encuentran los curanderos, que son capaces de sanar a sus compañeros; los magos, que pueden otorgar poderes; y los guardianes, que protegen y defienden al grupo. Se trata de una experiencia educativa en la que cada menor es protagonista de su propio aprendizaje.

Cada una de las sesiones diarias comenzaba con un evento aleatorio, algún tipo de reto fácil y divertido. Este evento conseguía introducir a los menores en la dinámica y conectarlos desde el inicio de la sesión.

Con la proyección del juego daba comienzo la actividad, presentando el mapa de misiones con las tareas a completar. Mediante las numerosas propuestas educativas elaboradas por el equipo, los menores iban adquiriendo diversidad de aprendizajes de forma creativa e innovadora. Algunos ejemplos de las temáticas abordadas fueron la nutrición, la educación vial, bricolaje, elaboración de una rutina de ejercicios, actividades manuales, preparación para la emancipación… Todo ello con el objetivo de mejorar las habilidades y capacidades necesarias para hacer frente a la vida adulta.

Cuando los menores completaban las misiones propuestas de forma satisfactoria recibían puntos de experiencia que les permitían subir de nivel en la plataforma y conseguir recompensas. Además de esto, durante la rutina diaria establecida en el centro residencial, los chicos podían realizar diferentes tareas y actividades voluntarias que les otorgaba puntos extra en la plataforma.

En la dinámica establecida se fomentaba en todo momento el refuerzo positivo de los menores, tanto de manera virtual como mediante pequeñas recompensas diarias como meriendas especiales o mayor tiempo de descanso u ocio. Además, cada uno de los roles obtenía cristales de poder en función de su desempeño durante las misiones. Estos cristales podían ser utilizados en beneficio propio o de alguno de sus compañeros, por ejemplo, para otorgarle puntos de vida si alguno se había quedado sin ellos.

En la programación también se tenía en cuenta las conductas susceptibles de sanción que afectaban negativamente al funcionamiento del recurso residencial. En estos casos, lo menores veían reducidos sus puntos vitales en el juego, afectando también a sus compañeros.

Tras la puesta en marcha de este proyecto durante los meses de verano, la valoración de la totalidad del equipo es, sin duda, muy positiva. Esta propuesta educativa ha favorecido el reciclaje del grupo de profesionales que ha exprimido al máximo sus capacidades creativas para desarrollar actividades atractivas y novedosas que han sido muy bien acogidas por los chicos.

El uso de este tipo de herramientas despierta un especial interés y una gran implicación por parte de los menores. La mayoría de los chicos del grupo ha mostrado altos niveles de compromiso tanto dentro como fuera del juego. En definitiva, la combinación de autonomía en el propio aprendizaje, uso de las tecnologías de la comunicación y la información y grandes dosis de imaginación han sido todo un éxito.

 

Por JOSÉ CARLOS MARTÍNEZ SERRANO / Educador social del Residencial (ARB) Motril

ISL SAMU Arcos: Ousman, Burama e Ilyass le dan la vuelta a su destino

El recurso ISL Arcos, ubicado en la comarca de la Sierra de Cádiz, no solo es la puerta de entrada a uno de los enclaves paisajísticos más llamativos de la provincia gaditana, sino que también abre puertas a sueños. En este caso, hablamos de los sueños de tres chicos que conviven en nuestro recurso desde hace un año.

Burama Camara, de 17 años, nacido en Boufour (Gambia). Hijo único de una familia humilde, no tuvo posibilidad de estudiar todo lo que le hubiese gustado y, a los 11 años, comenzó a trabajar en un taller de soldadura que estaba cerca de su casa. En 2021, decidió, junto con su amigo Saikou, emigrar en busca de oportunidades.

Tras 16 meses de esfuerzo, constancia y trabajo en el recurso de SAMU en Arcos, Burama domina el español con fluidez. Estuvo realizando prácticas formativas en la empresa Arci Motor, empresa que, meses después, le ofreció su primer contrato de trabajo. Este chico de carácter noble y guasón se ha ganado el respeto y amistad de todos sus compañeros de trabajo, está muy integrado en la cultura occidental y ha trabajado duro para entrar con buen pie en esta etapa de su vida, la cual afronta con responsabilidad, compromiso e ilusión.

Otra puerta abierta al optimismo y la ilusión es la de Ousman Janneh, joven de 17 años procedente de Gunjur (Gambia). Él es otro referente a seguir en nuestro recurso. Es un chico reservado, discreto y buen compañero, pero, si en algo destaca Ousman, es en su disciplina para conseguir sus propósitos.
Durante meses, su único afán era lograr un contrato de trabajo y, para ello, estudiaba español incluso por las noches y en sus ratos libres. Tras varios meses de prácticas en una lavandería de la localidad, Lavandirect, el joven ha firmado su primer contrato de trabajo. Su discreción y disciplina le ha permitido ganarse el lugar que hoy en día ocupa en la empresa.

Por último, no es más importante lo que pronto llega, sino lo que llega para quedarse. Este es el caso de Ilyas El Bakkali, de 17 años y natural de Marruecos. Es el sexto hijo de una familia numerosa de 13 miembros y el único que decidió emprender su viaje a España en busca de una oportunidad de progreso personal y laboral.

Ilyas llegó siendo un chico respetuoso pero con cierta apatía por la vida y con baja motivación, siendo cumplidor de sus obligaciones pero sin aspiraciones. Desde el equipo de ISL Arcos nos dimos cuenta que este menor tan solo necesitaba un poco de atención, cariño y confianza en sí mismo. Todo esto unido le permitió lograr un avance importante en su aprendizaje del español y así llegó su primer convenio de prácticas formativas en la empresa de Turismo Activo de Arcos. Ilyas ha superado con éxito el curso de Socorrismo Acuático y ha firmado su primer contrato en dicha empresa como monitor de actividades acuáticas.

Desde el recurso ISL Arcos estamos orgullosos de plasmar anhelos y abrir puertas a sueños que se hacen realidad.

 

Por JOSÉ CARLOS MARTÍNEZ SERRANO / Educador social del Residencial (ARB) Motril

Isla Mayor abre un centro de atención a mayores gestionado por Fundación SAMU

Fundación SAMU y el Ayuntamiento de Isla Mayor (Sevilla) unen fuerzas para la puesta marcha de una Unidad de Estancia Diurna (UED) dirigida a personas mayores en el municipio isleño. Esto va a ser posible gracias a una concesión administrativa por parte del Consistorio de un bien de dominio público.

Esta residencia de mayores, que abrirá sus puertas a principios de diciembre, estará ubicada en una parcela de titularidad municipal situada en la calle Paseo del Lucio Real. Es una edificación de nueva planta que ocupa una superficie construida total de 333 metros cuadrados. Esta UED tendrá una capacidad de 30 plazas.

En el resto de la parcela se encuentran un edificio destinado a una escuela infantil y otro edificio destinado a un centro de salud. En el extremo suroeste de la parcela está consolidado un parque destinado a espacios libres.

El edificio se desarrolla en una sola planta accediendo por la fachada que discurre frente al Paseo Lucio Real, a través de una cancela metálica por la que se entra al patio exterior del edificio que sirve de zona de descanso y ocio de uso exclusivo para los usuarios. Desde el patio se accede al interior del edificio a través del vestíbulo donde se ubican la recepción y administración del centro. A través de un distribuidor principal se conectan las estancias de sala de estar, comedor, aseos y zonas de atención especializada (terapia ocupacional y rehabilitación). En la zona noroeste, para facilitar el acceso de mercancías y personal, se ubica una entrada de servicio, la cual comunica la cocina, el almacén, cuarto de limpieza y aseos, de uso exclusivo del personal del centro. Todas las instalaciones se encuentran totalmente terminadas y en uso.

El Ayuntamiento de Isla Mayor aportará el mobiliario y el equipamiento valorado en 35.180,37 euros. Éste estará adaptado a los requisitos materiales y funcionales que la normativa exige para la dotación de Unidades de Estancia Diurna.

La concesión del edificio por parte del Ayuntamiento para el uso y gestión de SAMU como UED para personas mayores tendrá una vigencia de 10 años, prolongable a 75 años más pasado el primer periodo.

Fundación SAMU, con sede en Sevilla, es una entidad líder en emergencias sanitarias, salud, formación y acción social, centrada en la atención a los colectivos más vulnerables. Tiene un equipo formado por 3.000 profesionales en España y actividad Marruecos, Estados Unidos y diversos países de América Latina.

Marcha multitudinaria por la inclusión en Mairena del Aljarafe

Alrededor de mil jóvenes marcharon el jueves 3 de noviembre en Mairena del Aljarafe a favor de la plena inclusión de las personas con diversidad funcional en la III Carrera Popular ‘Aljarafe Integra’, organizada por Fundación SAMU con la colaboración del Ayuntamiento de Mairena del Aljarafe. El alcalde de la localidad, Antonio Conde, fue el encargado de dar la salida de esta prueba, a las once de la mañana, en el Parque Central de la localidad, poniendo énfasis en la importancia de “llegar todos juntos” y “trabajar por la igualdad real todos los días de nuestra vida”.

La prueba unió el Parque Central y el Parque Periurbano Porzuna en un trayecto de dos kilómetros de distancia con el objetivo de fomentar la inclusión, a través del deporte, de las personas con algún tipo de diversidad funcional y de otros colectivos vulnerables.

La carrera contó con la participación de las asociaciones y centros educativos de Mairena y otros municipios del Aljarafe. Antes de la salida, se celebró la lectura de un manifiesto en el que se subrayó que “la práctica del deporte conlleva la mejora de las habilidades sociales y físicas, y favorece muy especialmente a las personas con algún tipo de diversidad funcional”. “Nos comprometemos a luchar para que las personas con mayor vulnerabilidad sean visibles, favoreciendo su inclusión social y permitiendo una mejora en su calidad de vida y, por tanto, una mayor felicidad”, destacó este manifiesto conjunto.

Tanto en la salida como en la llegada de la carrera se habilitaron diferentes estaciones en las que se llevaron a cabo juegos y actividades de sensibilización para los participantes, todas ellas adaptadas.

Es la tercera edición de la Carrera Popular Aljarafe Integra tras las celebradas en 2016 y 2018. El evento se ha convertido en un ejemplo de colaboración entre instituciones públicas y privadas. Además de la implicación del Ayuntamiento de Mairena, han participado empresas como Adaptasur y entidades como Fundación La Caixa, Protección Civil de Castilleja de la Cuesta o el Grado Superior en Animación de Actividades Físicas y Deportivas (TAFAD) del IES Carmen Laffón de San José de la Rinconada, entre otras muchas.

SAMU y la Universidad Pablo de Olavide presentan la Cátedra SAMU de Innovación Social

SAMU y la Universidad Pablo de Olavide presentaron la Cátedra SAMU de Innovación Social durante unas jornadas celebradas el 28 de septiembre en el campus de la UPO. La vicerrectora de Relaciones Institucionales y Fundaciones de la Universidad, Laura López de la Cruz; el presidente-director general de SAMU, Carlos González de Escalada; y el director de la Cátedra y profesor de la UPO, José Luis Sarasola, presentaron los objetivos de un proyecto de cooperación que aspira a mejorar el bienestar social de las personas más vulnerables a través de la innovación social.

“Innovar es cambiar. Hagamos las cosas de otra manera, busquemos nuevas soluciones a los problemas sociales trabajando con otras entidades y empresas”, recalcó José Luis Sarasola durante la presentación de la cátedra que dirige. “Para ello, que mejor socio que SAMU, que no solo trabaja en el ámbito de la salud, sino también con residencias, con los problemas de la infancia, con familias, en educación y en atención psicológica, además de investigación y desarrollo”, añadió.

Carlos González de Escalada, presidente y director general de SAMU, destacó la importancia de unir el trabajo desarrollado en la academia con el de las entidades de salud y bienestar social. “Nuestra especialidad es la atención de las personas que más lo necesitan”, ha señalado, poniendo en valor el conocimiento académico y la capacidad de una entidad que cuenta con 90 sedes y 3.000 profesionales y que se ha convertido en una multinacional de la salud y de la acción social, extendiendo su actividad a países como Marruecos y Estados Unidos.

Para finalizar la inauguración de las jornadas, Laura López de la Cruz, subrayó la importancia de las cátedras como instrumento para crear conocimiento, investigar y aplicar los resultados, remarcando la necesidad de investigar también en el ámbito social “para que todos nos sintamos incluidos en una sociedad que avanza a marchas forzadas”. “Agradecemos a SAMU su participación en la cátedra porque sabemos que juntos sumamos”, concluyó.

Las jornadas contaron con la participación de David Pino Merlo, director general de Innovación Social del Ayuntamiento de Sevilla, como ponente invitado. Cómo innovar a través de la democracia: innovación social y desarrollo local sostenible fue el título de su conferencia en la que afirmó que la innovación social es la búsqueda de una solución novedosa a un problema social que aporte valor a la comunidad, señalando que la tecnología debe ser una herramienta a su servicio.

Las jornadas continuaron con la mesa redonda Presente y futuro de la Cátedra de Innovación Social, moderada por Juana Macías, directora del Instituto Científico y Academia SAMU. Durante la misma fue presentado el libro Migraciones: nuevos retos geopolíticos, económicos y sociales, y el Máster de Emergencias Socio-Sanitarias, título propio de la Universidad Pablo de Olavide que se imparte por primera vez este curso. Migraciones es una obra colectiva, coordinada por Carlos González de Escalada y José Domínguez León, en la que profesores de doce universidades analizan el fenómeno migratorio abordándolo desde múltiples perspectivas. Por otro lado, el Máster en Emergencias Socio-Sanitarias: Prevención e Intervención con Colectivos de Riesgo, dirigido por los profesores de la UPO Evaristo Barrera y José Luis Sarasola, proporciona formación universitaria especializada en el campo de las emergencias sociales.

Un espacio de colaboración

La nueva cátedra de la Universidad Pablo de Olavide, gracias a la financiación de SAMU, establecerá un marco de colaboración entre ambas entidades para el desarrollo del conocimiento en el área sociosanitaria a través de la innovación social. El objetivo es crear sinergias entre los 40 años de experiencia en el ámbito de la salud y la atención social de SAMU, y la alta cualificación del equipo investigador y académico del departamento de Trabajo Social y Servicios Sociales de la Universidad. José Luis Sarasola, profesor titular de este departamento, dirigirá la cátedra.

La nueva Cátedra SAMU de Innovación Social permitirá llevar a cabo actividades de formación, tanto reglada como no reglada, y promoverá la cooperación educativa entre ambas entidades para la mejora de la empleabilidad de los estudiantes.

Además, está prevista, en el marco de la cátedra, la concesión de becas, ayudas y premios. En investigación, impulsará el desarrollo de nuevas líneas de trabajo relacionadas con la innovación social del tercer sector y la elaboración de informes y estudios en los ámbitos de la salud y la acción social, promoviendo proyectos conjuntos de mejora.

En divulgación y transferencia del conocimiento, se promoverán los valores y principios que fomenta la cátedra a través de actividades culturales y de difusión, la publicación de los resultados de las investigaciones llevadas a cabo y la organización de congresos y conferencias.