Abdoulie, primer beneficiario del convenio con Cosentino

La multinacional con sede en Almería Cosentino Industrial y Fundación SAMU han firmado un convenio de colaboración que permitirá a los menores de los centros de la fundación realizar prácticas formativas en esta empresa. Cosentino es una multinacional que produce superficies para la arquitectura y diseño (las más conocidas son Silestone y Dekton) y que está presente en los cinco continentes (distribuyen sus productos en más de 120 países).

Por primera vez en la amplia historia de Cosentino, la multinacional abre sus puertas a la formación de menores inmigrantes no acompañados, con posibilidad de contratación para estos jóvenes. Este paso supone una inmensa alegría para nuestro centro, por la enorme oportunidad que ofrece a nuestros chicos.

Uno de los menores seleccionados para estas prácticas fue Abdoulie Drammeh, que firmó su primer contrato de trabajo el 5 de septiembre en la sección de elaborados de Cosentino. Abdoulie procede de Gambia. Su vida no fue fácil, debido a la precaria situación económica de su extensa familia. El menor recuerda: “Fue mi madre la que me ayudó a venir a España. Ella tenía animales y los vendió para que pudiese pagar mi viaje aquí. Mi padre no quería que viniera porque mi hermano murió intentando llegar a Europa, ahogado entre Argelia e Italia”.

Abdoulie llegó a nuestro centro, una casa ubicada en Serón, un pueblo de Almería, hace poco más de año y medio. “Cuando llegué al centro, sólo hablaba mandinga y un poco de árabe. Mi amigo me tenía que traducir todo lo que me decían. No sabía nada de español. Tampoco sabía leer ni escribir. Casi no sabía coger un lápiz. Una de las educadoras me dio un libro que se llamaba Michu para empezar a aprender el alfabeto. Yo siempre estaba con mi libro. Los educadores venían a mi cuarto por la noche y me pedían que parase de estudiar, que mañana sería un nuevo día. Algunos chicos se reían de mí porque creían que yo era tonto, porque siempre iba con mi libro”, relata el joven.

“Aprendí español con ese libro y con las clases y la ayuda de las personas del centro. A veces me daba vergüenza porque yo siempre los buscaba en el despacho para estudiar y, cuando hacían fotos para SAMU, yo siempre salía allí, en el despacho. Tuve mucha suerte de llegar a este centro. Tomé mucha confianza en mí mismo porque aquí te tratan así para tener confianza. Yo pensaba que no podía ni aprender español, y ahora, ¡Madre mía!, ¡Mírame! Todo lo que he conseguido gracias a la ayuda en este centro, gracias a SAMU”, recuerda.

Meses después de llegar al centro, Abdoulie comenzó a realizar sus primeras prácticas formativas en una empresa de limpieza y mantenimiento de maquinaria industrial de la localidad de Baza (Granada). “A los tres meses de llegar, ya me encontraron unas prácticas formativas. Yo hablaba muy poco español. El jefe me decía que hiciese algo y, como no lo entendía, hacía otra cosa”, recuerda Abdu entre risas. “Me llevaba muy bien con mi jefe, trabajé con él en muchos pueblos. Cuando acabé las prácticas formativas, me pidió seguir, pero yo quería estudiar”.

Y ese fue el siguiente paso del menor. En septiembre de 2021 el menor fue matriculado en el IES Rosa Navarro de la localidad de Olula del Río. “En la ESO no entendía nada. Cuando los educadores me preguntaban qué prefería, si la actividad de deporte o estudiar, yo decía siempre que estudiar para la ESO”.
Un mes después, en octubre de 2021, Abdoulie fue matriculado en la Escuela de Mármol de Fines (Almería). “La educadora me dijo que ese curso era muy bueno para mí, para trabajar. Me enseñó fotos de la retroexcavadora y la dumper y como me hacía mucha ilusión conducirlas, dije que sí”.

“Me levantaba a las siete de la mañana y empezaba el curso a las nueve. Salía a las dos y, cuando llegaba al centro, comía y me duchaba. Después estudiaba y, por la tarde, iba a la escuela de adultos, los lunes y viernes, y al instituto los martes y miércoles. Yo llegaba al centro al final del día muy cansado. Mi profesora de la escuela de adultos me aconsejó que dejase una cosa porque era mucho para mí porque yo no sabía ni leer ni escribir. Quería dejar la Escuela de Mármol, pero me daba mucha vergüenza hacerlo, eso no está bien. Un día bajé al despacho y se lo dije a Tamara (trabajadora social del ISL SAMU Serón). Me dijo que no dejase nada, porque aunque no aprobase ni la Escuela de Mármol ni la ESA, eso sería mío, me serviría para aprender mucho”.

“Al final, con la ayuda de los educadores y de Miriam (mi profesora de la Escuela de Adultos de Serón) pude aprobar las asignaturas del instituto y también las de la Escuela de Mármol. En mayo de 2022 acabé en este centro formativo y Encarna (directora del ISL SAMU Serón) ya me tenía otras prácticas en Cosentino, en las que empecé en junio como jardinero”, relata Abdoulie.

Una empresa líder

Tras acabar las prácticas formativas en Cosentino, la empresa manifestó su interés por contratar al menor. A finales de agosto, Abdoulie alcanzó la mayoría de edad, por lo que abandonó el centro y se trasladó a vivir a Olula del Río. Ahora ha sido contratado en una de las mejores empresas del país y acude a la misma en el autobús que la empresa facilita a sus trabajadores.

“Mucha gente me pregunta cómo he entrado en Cosentino porque es difícil entrar en elaborados (sección de Cosentino en la que montan lavabos, cocinas y similares de Silestone). Llegan las tablas de Silestone y, fijándome en un plano, hago las medidas y mis compañeros cortan. Me gusta mucho mi trabajo y, además, todo el mundo me trata muy bien y me enseña cosas nuevas. Me han enseñado a manejar grúas para trasladar las tablas de Silestone”, señala el joven. “Empiezo a las seis de la mañana, pero yo llego antes porque el autobús llega antes de la hora de entrada. Yo entro con la tarjeta, porque es muy importante ser puntual y responsable. Allí espero tomando algo caliente antes de empezar a trabajar”.

“Mi familia está muy orgullosa de mí. Tengo mucha suerte porque hablo español, tengo muy buen trabajo, estoy estudiando y me voy a sacar el carné de conducir”, concluye el joven.

ISL SAMU SERÓN

COISL SAMU Motril: diez años y 278 vidas que contar

El programa COISL SAMU Motril para menores del sistema de protección y su orientación sociolaboral comenzó su andadura el 1 de octubre de 2012. Fue uno de los primeros proyectos de protección de menores de Fundación SAMU en abrir sus puertas. Ha transcurrido una década de trabajo incesante que hemos compartido con 278 menores derivados del Sistema de Protección de Menores de la Junta de Andalucía. Estos menores procedían de diversos países: España, Siria, Marruecos, Mali, Senegal, Kenia, Nigeria, Guinea…

Uno de los puntos de inflexión del programa fue el 23 de septiembre del 2016 con la recepción en Madrid de los primeros menores no acompañados procedentes del conflicto sirio. En una de las mayores crisis humanitarias europea, la Junta de Andalucía confió en Fundación SAMU y en el COISL SAMU Motril para que éste último se convirtiera en el primer centro de protección de menores en España en acoger a siete menores procedentes del conflicto. Fue un proyecto aplaudido por el Alto Comisionado de las Naciones Unidas para la Ayuda a Refugiados (ACNUR).

Todo este bagaje ha propiciado que el COISL Motril se haya ido adaptando a lo largo de los años a las necesidades y los retos que han ido marcando la Administración.

El programa partió de cero en una localidad, Motril, que desconocía el sistema de protección y su funcionamiento. Esto obligaba al equipo del SAMU a darse a conocer, abriendo puertas y mentes al contexto social, laboral y formativo de la zona.

Es importante mencionar que, aunque el COILS SAMU Motril es un centro especializado en la inserción laboral, el eje angular del proyecto ha estado centrado en el acogimiento residencial y en lograr que cada uno de los menores acogidos disfrutara de una vida acorde a su edad.

En este sentido, el equipo educativo del COISL realiza una programación anual de ocio y cultura que aborda esta parte del proyecto de intervención. Durante estos diez años, han sido infinidad de actividades las que los jóvenes del recurso han podido disfrutar. Desde ir al cine o ver un partido de fútbol o baloncesto, hasta ir de acampada o de visita cultural a distintas ciudades.

Centrándonos en el aspecto formativo y laboral, uno de los pasos más importantes del proyecto son las relaciones que se generan con las empresas de la zona. El COISL SAMU Motril cuenta con la colaboración de más de 150 empresas. Además, disfruta de una relación estrecha con programas de formación y empleo de la provincia que dan seguimiento y apoyo a los menores acogidos.

Durante la última renovación del programa que dio comienzo en diciembre del 2019, y que convivió con una emergencia mundial de salud pública por la pandemia del Covid-19, el COISL ha registrado una tasa de éxito de inserción laboral de 87%. Es decir, de las 45 emancipaciones que se han realizado desde diciembre de 2019 hasta la fecha, 36 menores han continuado su plan de vida fuera del programa de forma independiente, autónoma y satisfactoria. Estos datos son fuente de orgullo del programa, pues gracias al trabajo de un equipo coordinado, el proyecto ha podido ser el apoyo y la guía que estos menores necesitan.

Para el equipo del COILS SAMU Motril, estos 10 años de éxito requieren de una celebración a la altura. Por este motivo, y gracias a la ayuda de la coordinación de Andalucía Oriental y la dirección del área de Infancia y Familia de Fundación SAMU, se han puesto en marcha las II Jornadas Los adolescentes en los centros de protección de menores, que se celebrarán el 22 de noviembre en las instalaciones del Centro de Desarrollo Turístico de Motril.

El evento contará con ponencias de referentes del sector de las instituciones públicas como Esther Aguilera, jefa del servicio del Sistema de Protección de Menores de Granada, o Ramón Rodríguez Gómez, coordinador de mediación intercultural para la atención integral a menores inmigrantes en Andalucía. Además, formarán parte de una mesa redonda técnicas de los servicios de formación y empleo y los programas de colaboración del COILS SAMU Motril. Estas jornadas serán el colofón final a estos 10 años de historias de vida.

Las personas que estén interesadas en asistir al evento, pueden inscribirse a través del siguiente enlace:  Pincha aquí

 

Por ISOLINA ANTEQUERA. / Directora del COISL SAMU Motril

Las personas son lo importante

El 13 de diciembre de 2006, se aprobó en la ciudad de Nueva York, en la sede de Naciones Unidas, la convención sobre los derechos de las personas con discapacidad, el tratado internacional que protege los derechos de las personas con discapacidad y a sus familias. En España, fue aprobado el 3 de diciembre de 2007 y, a partir de esa fecha, empezó a celebrarse el Día Internacional de las Personas con Discapacidad coincidiendo con la efeméride. Su principal propósito es, como queda detallado en su artículo 1, “promover, proteger y asegurar el goce pleno y en condiciones de igualdad de todos los derechos humanos y libertades fundamentales por todas las personas con discapacidad y promover el respeto de su dignidad inherente”.

Esta ley universal ha supuesto que en los últimos años se haya producido una modificación sustancial en cuanto a la atención a las personas con discapacidad. La sociedad ha ido evolucionando y trasformando su visión sobre este colectivo, gracias al esfuerzo reivindicativo de las mismas personas con discapacidad, las instituciones, organismos y movimientos asociativos que las respaldan. Este cambio en la percepción y reconocimiento de sus derechos como miembros de pleno derecho ha propiciado el nacimiento de nuevos modelos de intervención enmarcados en el seno de la inclusión social, el respeto, la igualdad de derechos, la autodeterminación, la provisión de apoyos, el acceso al mercado laboral, la dignidad y la igualdad.

Para lograr todos estos objetivos y mejorar la atención y la calidad de vida, desde los centros de atención a la discapacidad de Fundación SAMU, dependientes del área de Dependencia e Inclusión Social de SAMU, se ha ido trasformando el modelo de intervención, basado en la salud y la rehabilitación, en un modelo más social y acorde con las exigencias sociales actuales, y que aúna la inclusión social, la provisión de apoyos, el logro de resultados personales y la calidad de vida, con una planificación centrada en la persona.

Para responder a los retos y obligaciones de una atención de calidad, se parte de los actuales modelos conceptuales de la discapacidad, la calidad de vida y los apoyos individualizados, desde los que se entiende a las personas como el centro de toda planificación, tanto en la toma de decisiones y sus preferencias, como en los procesos para llevarlos a cabo. Desde esta perspectiva, nuestros centros se van transformando en lugares de convivencia, viveros de oportunidades y lugares de vida, y los profesionales de éstos, en apoyos para que puedan desarrollar su propio proyecto de vida.

La planificación centrada en la persona se ha convertido en la piedra angular de las buenas prácticas en la organización de nuestros servicios. Y el principal objetivo es asegurar que el énfasis se ponga en la persona con discapacidad, en sus habilidades y potencialidades, y en el éxito en la consecución de aquellos resultados valiosos que son significativos para ella, a través de la organización de un sistema de apoyos personalizados que facilite la consecución de los resultados seleccionados. Es una transformación en todos los niveles de funcionamiento de los servicios, ya que se dirige a, ya no la resolución de problemas, sino hacia espacios de oportunidades de desarrollo, la libertad personal, la interdependencia significativa, la dignidad, la autorrealización y la participación activa en la comunidad como miembros de pleno derecho.

Los aspectos relacionados con la salud, la seguridad y la adquisición de habilidades habían sido considerados durante décadas como objetivos prioritarios de los programas y servicios, obviando que es la persona, con su historia de vida, sus relaciones personales, su entorno, sus potencialidades y sus sueños, la que deben estar en el centro de estos programas y en la base de la organización.

Llevar adelante estas nuevas perspectivas supone y nos exige nuevas maneras de pensar, actuar e intervenir, de la mano de unos profesionales que sepan afrontar con valentía, seguridad e innovación los nuevos retos que se nos plantean. Esta visión renovada nos hace progresar hacia una sociedad inclusiva e igualitaria, donde todos los seres humanos pueden alcanzar los mismos estándares de calidad y bienestar. Y, por ende, la calidad de nuestros servicios avanza hacia la excelencia, algo que ya empieza a obtener sus frutos en la mejora de la calidad de vida de nuestras personas usuarias, con resultados visibles y que van más allá de nuestros centros, ya que repercute positivamente en toda la comunidad donde se ubican.

Nuestra sociedad necesita organizaciones responsables y comprometidas que trabajen en proporcionar las relaciones y los apoyos necesarios para que todas las personas puedan desarrollar su propio proyecto de vida y felicidad, independientemente de su procedencia, de su edad, condición social, de si tienen o no discapacidades, de si son mujeres u hombres, de si proceden de un país u otro o de la edad que tengan. Éste es el compromiso de todos los centros de atención a personas con discapacidad del área de Dependencia e Inclusión Social de Fundación SAMU, y trabajamos día a día para cumplir estos principios.

 

Por SONIA OLIVER POZO / Área de Dependencia e Inclusión Social

SAMU planea una escuela de emergencias en El Salvador

Santiago Llop, director para Iberoamérica de SAMU, visitó el 22 de agosto El Salvador para impulsar el Convenio Marco de Cooperación Técnica Interinstitucional con el que se pretende trabajar en la promoción y transferencia de tecnologías, intercambio de experiencias, actividades de investigación científica y la organización de programas académicos para fortalecer así los lazos de solidaridad, igualdad, hermandad y cooperación que unen al país con España y la entidad sevillana.

En este encuentro, Llop tuvo la oportunidad de reforzar el convenio firmado en 2021 y establecer nuevas hojas de ruta para SAMU entre las cuales destacan la creación de una Escuela Regional de Emergencias, Urgencias Médicas y Atención de Desastres y un centro formativo destinado no solo a los profesionales sanitarios salvadoreños, Protección Civil, Fuerzas Armadas, policías y bomberos, sino que también estará enfocado a todos los estudiantes y profesionales de países de Centroamérica como Guatemala, Honduras, Nicaragua, Costa Rica, Panamá, entre otros.

El director para Iberoamérica de SAMU tuvo la oportunidad de reunirse con diversos representantes de instituciones salvadoreñas, entre los que destacan miembros de la Consejería de Salud, FOSALUD (Fondo Solidario para la Salud) y la Agencia de El Salvador para la Cooperación Internacional, entre otras instituciones. En estos encuentros se abordaron diferentes cuestiones como la creación de un programa de movilidad internacional destinado a todos los estudiantes de medicina, psiquiatría y psicología que deseen realizar sus prácticas en centros de SAMU como Escuela SAMU o SAMU Wellness, la elaboración de estudios de investigación social junto a FOSALUD y la organización de una conferencia sobre Bioética, celebrada el pasado 27 de septiembre.

En los últimos años, SAMU ha afianzado su presencia internacional llevando a cabo diversas misiones humanitarias y de cooperación en países como El Salvador o Honduras, así como en la frontera de Moldavia y Rumania con Ucrania tras el estallido de la guerra provocada por la invasión rusa. Asimismo, ha dirigido diversos dispositivos contra el Covid-19 a nivel nacional, en regiones como Madrid, Andalucía y Castilla-La Mancha, e internacional, como la llevada a cabo en El Salvador en junio de 2021, activada como respuesta a la solicitud de asistencia emitida por el Ministerio de Salud de El Salvador para dar apoyo a un nuevo hospital, el Hospital Nacional El Salvador, localizado en San Salvador, que abrió sus puertas el 21 de junio con 105 camas de UCI y 100 camas hospitalarias y que fue adecuado de forma paulatina para poder ofrecer hasta 1.000 camas de UCI. Por otro lado, SAMU participa en la recepción de emergencia habilitada por las autoridades de Washington D.C. para asistir a los miles de migrantes que se desplazan hasta la capital estadounidense en autobuses fletados por las autoridades de estados fronterizos del sur.

La organización española ha fortalecido su presencia internacional a través de diversos convenios firmados en los últimos años entre los que destaca, el firmado recientemente con la provincia del Guayas (Ecuador), cuyo objetivo girará en torno a la elaboración de programas para tratar las adicciones y otro sobre nutrición, ambos dirigidos a la población más vulnerable. Asimismo, SAMU trabaja para llevar a cabo la creación de la Escuela de Urgencias y Emergencias Médicas con la Marina de Perú, dentro de la Escuela de Sanidad de la Marina, con el fin de ofrecer formación a profesionales sanitarios y el mismo sistema de prácticas internacionales que se está promoviendo en El Salvador, en este caso, para estudiantes peruanos que deseen realizar una estancia formativa en centros de SAMU, Fundación SAMU, Escuela SAMU y SAMU Wellness. Por último, está prevista la firma de dos convenios de cooperación entre los días 17 y 22 de octubre en Lima: el primero con la Marina del Perú y el segundo con la Universidad Norbert Wiener.

JEM Córdoba: El último impulso para los menores

El programa para Jóvenes Extutelados Migrantes (JEM) —cofinanciado por el Fondo Social Europeo— que gestiona Fundación SAMU en Córdoba atiende a aquellos jóvenes que necesitan apoyo en la inserción sociolaboral una vez que estos abandonan los centros de protección de menores al cumplir la mayoría de edad y no cuentan con recursos económicos, sociales o familiares para poder llevar una vida independiente.

Algunos de estos jóvenes, cuando llegaron a España, fueron acogidos en alguno de los centros y recursos de protección de menores de Fundación SAMU, por lo que conocen ya la organización. En concreto, actualmente residen en el JEM Córdoba Yassine Sabyh, Hamza Dauali y Mohammed Jabri, que coincidieron en el ISL SAMU Lucena durante sus respectivas minorías de edad y que, tras diversas trayectorias, han vuelto a encontrarse en el Programa JEM de Fundación SAMU.

Yassine Sabyh

Yassine Sabyh llegó a España en junio de 2019 tras abandonar su ciudad natal en busca de una oportunidad que le permitiese optar a un futuro mejor. Después de pasar por varios centros en tierras andaluzas, ingresó en el centro de Inserción Sociolaboral SAMU Lucena, donde permaneció hasta su mayoría de edad, cuando encontró trabajo en Almería y se dispuso a vivir de forma autónoma. No obstante, la caducidad de su documentación impidió el progreso de este proyecto.

Dada la complicada situación documental a su llegada al JEM, Yassine Sabyh no tenía más opción que regularizar su situación a través del arraigo social, lo que implicaba la permanencia en España durante tres años, un informe de integración y, lo más complicado, un precontrato de trabajo de un año de duración a jornada completa.

Con estas condiciones de partida, el joven comenzó prácticas formativas a través de un convenio de colaboración con Fundación SAMU, en el sector de la jardinería. Luego, probó en distintas empresas hasta dar con Mojarly S. L. Jardineros, en Córdoba, donde, tras un período de prácticas, le ofrecieron un precontrato de trabajo con las condiciones necesarias. Yassine Sabyh apunta: “Del centro salí bien, por lo menos tenía trabajo. Las prácticas son duras, pero me gustan, y hay un montón de trabajo. Quiero vivir por mi cuenta, con un buen trabajo, solo necesito la documentación”.

Hamza Dauali

Por su parte, Hamza Dauali arribó a las costas españolas en septiembre de 2020 con el objetivo de encontrar un empleo estable. Al llegar, fue derivado al ISL SAMU Lucena, donde permaneció hasta cumplir la mayoría de edad. Durante ese tiempo, Hamza Dauali aprovechó para estudiar español, haciendo progresos considerables, y para efectuar prácticas formativas como soldador en una empresa de la localidad, lo que, al salir del centro, le valió un contrato de trabajo que le permitió vivir de forma autónoma hasta la caducidad de su documentación. Ante esta nueva situación y la imposibilidad de renovación, el joven ingresó en el Programa JEM como medio para regularizar su situación.

Durante su estancia en el JEM, Hamza Dauali ha conseguido renovar el permiso de residencia y trabajo, lo que le ha permitido comenzar la búsqueda activa de empleo. Para ello, el joven ha efectuado diversas prácticas formativas no laborales en empresas, buscando un trabajo estable.

“Quería entrar en el programa JEM para poder salir adelante. No me importa el tiempo que vaya a tardar, pero quiero encontrar un buen sitio, que sepa que voy a estar bien. Tengo planes para el futuro y solo necesito empezar a trabajar ya”, señala el joven Hamza Dauali.

Mohammed Jabri

En cuanto a Mohammed Jabri, el joven llegó a España en julio de 2021 e ingresó directamente en el ISL SAMU Lucena. Desde allí fue derivado al JEM tras cumplir la mayoría de edad. A su llegada al programa, al joven le había caducado la documentación, por lo que el primero de los objetivos del equipo de SAMU fue la renovación del permiso de residencia y de trabajo, que se consiguió en marzo de este mismo año. Al mismo tiempo, Mohammed Jabri, a través de prácticas formativas, ha ido adquiriendo experiencia y competencias transversales para el empleo que, en última instancia, le han permitido obtener un contrato de trabajo en Solycarpa como mozo de almacén.

Esta progresión facilita en gran medida su itinerario de inserción sociolaboral y su autonomía personal, favoreciendo el desarrollo de su proyecto vital adaptado a sus necesidades y gustos. “Dejé los problemas en el centro. Solo quiero trabajar, ahorrar y viajar para ver a mi familia cuando pueda”, comenta Mohammed.

De sus experiencias se extraen diversas conclusiones. Por una parte, la continuidad de la intervención en las diferentes etapas es un factor fundamental en el diseño del itinerario personalizado de inserción de los jóvenes en los Programas JEM.

En este sentido, contar con la información y experiencia de los profesionales que han desarrollado su labor con los jóvenes previamente facilita la integración de objetivos, estrategias y actuaciones con respecto al proyecto vital del joven, como se observa en el caso de Mohammed. Aun así, es necesario siempre reevaluar la situación del joven, por los cambios inevitables que se dan en su proyecto vital.

Por otra parte, es de destacar el apoyo continuo que los y las profesionales brindan a los jóvenes una vez se convierten en extutelados. A través de esta asistencia es posible detectar las necesidades concretas y, como en el caso de Hamza y Yassine, conseguir que opten a plazas de mayoría para evitar las situaciones de exclusión social a las que se ven expuestos por diversos motivos.

Finalmente, las experiencias de estos jóvenes, ejemplos de tantos otros, ilustran la necesidad del acompañamiento y asistencia necesarios en distintas etapas de sus vidas, si bien siempre con el objetivo de conseguir su plena autonomía e independencia, para el desarrollo de sus proyectos vitales.

JUAN ANTONIO LUQUE PEREGRÍN
JEM Córdoba

Los tres objetivos de DISL Nervión en su proyecto con los menores

La mayoría de mis amistades y familiares conocen muy bien a lo que me dedico y puedo compartir con ellos los éxitos y alegrías que me da mi trabajo. Pero, cuando mis compañeros o yo conocemos a gente nueva y nos hacen la típica pregunta de “y tú, ¿a qué te dedicas?”, ahí tenemos que explicar varios conceptos que están en nuestro día a día. Habitualmente, yo contesto con una broma en la que comento que soy padre de 16 menas. Ante su habitual cara de asombro, le explico que no trabajo en ninguna cárcel, que los niños son libres dentro de unas normas de convivencia, que la mayoría asisten a centros de estudios reglados, que realizan actividades de ocio como cualquier otro chico o chica de su entorno o que tienen sus móviles y usan sus redes sociales para comunicarse con sus familias.

Normalmente se quedan satisfechos con las respuestas y comparten conmigo alguna experiencia que han tenido con personas migrantes, terminando la conversación en ese punto. Pero hay otras personas que se interesan más por cómo trabajamos, qué proyectos tenemos nosotros y los propios menores, los motivos de su viaje, y, sobre todo, se preocupan por su futuro.

Es ahí cuando, también de manera sencilla y con cierto tono de humor, le respondo así: “Con ellos tengo tres objetivos: que se echen una novia, que vivan solos y no me necesiten, y que me inviten a su boda”. Y entre risas, paso a explicarles los motivos de cada punto.

Cuando un menor llega a nuestros centros, habitualmente los contactos que tiene son escasos y se limitan a otros menores o educadores con los que han coincidido en los centros por los que han pasado. Una vez ingresan en nuestro recurso, comenzamos a trabajar el idioma español, pilar sobre el que se sustenta su integración social, el objetivo principal de toda nuestra labor. Acto seguido, son escolarizados o acuden a centros formativos prelaborales donde aprenden un oficio y, para esto, deben saber desplazarse de manera autónoma, coger trasportes públicos, orientarse en otros barrios o pueblos, y adquirir rutinas y horarios, entre otras cuestiones. Por lo que, si un menor le comenta a algún componente del equipo que tiene una pareja, esto es un indicador del buen hacer, ya que significa que ha conseguido hacer amigos, tener contactos nuevos fuera del centro, incluirse en la sociedad que le acoge y que su nivel de comprensión y expresión del español es lo suficientemente alto para poder hablar con una pareja.

Uno de los primeros que nos presentó a su novia fue Ayoub, un chico que ingresó el día de la apertura del recientemente clausurado ISL Polanco. A los pocos meses, su español fue lo suficientemente bueno para conocer a una chica con la que a día de hoy continúa compartiendo su vida como un joven la suele disfrutar: yendo a la playa, haciéndose fotos románticas, dedicándose canciones y simplemente paseando orgullosamente agarrados de la mano. También vive felizmente en pareja Ossama, que acaba de volver de visitar a su familia, o Abdelhak, que va a ser padre dentro de pocas semanas y vino a contármelo rebosante de alegría en cuanto lo supo.

La independencia también es otro objetivo que buscamos. Independencia económica, de vivienda y administrativa. Siempre digo que uno de los mayores choques culturales que tienen los menores migrantes se produce cuando tienen que tratar con la administración, ya que, normalmente, en sus países de origen la forma de solicitar algo difiere mucho con la de Occidente: cita previa, instancia, solicitud, tiempos administrativos o certificado digital, entre otras cuestiones. Todos estos conceptos tardan mucho en adquirirlos e interiorizarlos. Y también encuentran dificultad a la hora de encontrar piso en el que vivir, casi, como cualquier otro joven: fianza, contrato, estabilidad económica…

Cada vez que coincidimos con Abdollah, recordamos con alegría el día que fuimos a IKEA a comprar todo lo que necesitaba para su piso: sábanas, toallas, menaje y decoración. Orgulloso, sacó su tarjeta de crédito a estrenar y pagó. Hoy, continúa viviendo en el piso que encontramos juntos y trabaja en el lugar en el que empezó sus prácticas. También vive de manera totalmente independiente Youssef, que ya solo me llama para decirme que le invite al campo del Sevilla si tengo algún carnet libre o para que le imprima algo porque no tiene impresora en casa. Ambos jóvenes fueron conscientes de que su esfuerzo tendría recompensa y supieron apreciar ese taller que recibieron en su momento sobre cómo comportarse en una entrevista de trabajo, que ahora les permite destacar y antes les parecía tan prescindible.

Quizás el momento boda aún se antoja lejano, pero, si llega ese día, será un placer acompañarlos y compartir con ellos la alegría. Pero, ¿qué podría indicarnos ese hecho? Pues que soy una persona importante para ellos, que me agradecen la ayuda que les he prestado durante su adolescencia y primera adultez. También es muestra de que, como con ese amigo de la infancia o de la universidad, seguimos en contacto, aunque cada uno hace su vida por su lado y recurrimos uno al otro cuando nos necesitamos. Lo más cercano que estoy de este punto es cuando doy un paseo durante el fin de semana por la zona de bares y me encuentro a mis antiguos chicos trabajando o tomando algo con los amigos.

Uno de ellos es Walid, que, de vez en cuando, pasa por el centro para saludar, que se acuerda de felicitarme en mi cumpleaños o que, incluso, me invitó a comer a su casa porque, según él, “había aprendido a cocinar algo que me iba a encantar”. O el amigo Bamba, que siempre nos recibe en su bar con una sonrisa y un fuerte abrazo.

Todas esas anécdotas son las que se quedan y nos reconfortan ante las situaciones difíciles en el trabajo. Porque cambiar el mundo no es una locura ni una utopía, sino ¡justicia!

JOSÉ MANUEL ROMÁN.
Director DISL Nervión

La despedida de Zakaria: “Me hicisteis ser la persona que soy”

Mi nombre es Zakaria Ait Bouhadidi y soy un chico que, actualmente (por suerte), trabaja con quien me dio la oportunidad de tener un hogar: SAMU. Ésta es mi historia:

Llegué a España en septiembre de 2020 en plena pandemia. Estaba asustado. Cuando desembarqué en la costa de Tarifa tuve miedo ya que no sabía qué me depararía el futuro, pero estaba muy ilusionado por lo que suponía estar en este país y poder tener un futuro mejor para mí y los míos.

Cuando llegué a Tarifa, me trasladaron al centro ISL Alcalá y ahí fui consciente de dónde estaba. Tuve mis altibajos durante mi estancia en este centro, ya que echaba de menos a mi familia, pero sacaba fuerzas pensando que estaba ahí por ellos. En el centro ISL Alcalá me dieron la oportunidad de formarme durante unos meses en el Centro de Día El Pino y, más tarde, realicé labores de pinche de cocina. Pero mi gran oportunidad llegó cuando, desde Fundación SAMU, me ofrecieron realizar un curso de Montaje de Módulos Prefabricados. Tras el curso y viendo las ganas que ponía, me ofrecieron trabajar con ellos cuando cumpliese los 17 años. Finalmente, firmé mi primer contrato de trabajo en España al cabo de unos meses y ese día lo recuerdo como uno de los mejores de mi vida. A la primera persona que llamé fue a mi madre para contárselo.

Gracias a este trabajo, además, no sólo conozco al personal del área de Infancia y Familia de SAMU, sino que he tenido la oportunidad de conocer a personas de otras áreas gracias a Juan Otero (mi jefe), que para mí es como si fuera mi segundo padre. Me gustaría mencionar a mis compañeros y amigos de trabajo: Gracias a su compromiso y apoyo estoy dónde estoy, puesto que me han enseñado muchas cosas.

Agradecer también a todos los compañeros que he tenido en los diferentes recursos de SAMU, pero, sobre todo, a los empleados, tanto a Manuel (director de ISL Alcalá) y Josema (director de DISL Nervión) y a todos los educadores que han sido fundamentales en mi proceso de aprendizaje. Y, finalmente, mi agradecimiento a Don Carlos, puesto que, sin él, todo esto no sería posible.

Me despido de mi casa. Muchas gracias SAMU. Hoy, mañana y siempre te recordaré como mi segundo hogar. Me hicisteis ser la persona que soy hoy. Hasta siempre.

ZAKARIA AIT BOUHADIDI

DISL SAMU Huelva: La receta de Soulayman

El futuro es una de las asignaturas pendientes de alcanzar por todos. Conseguir el futuro perfecto dependerá de cada perspectiva: si se busca innovar, destacar por algún ingrediente único, ser todo un clásico… Pero si en algo estamos de acuerdo es que todo parte de unos ingredientes básicos, unos ingredientes que nos darán la base para crear la receta perfecta y, a partir de ahí, transformar, dejar volar a la imaginación y los sueños.

Los ingredientes de esta receta son motivación, formación, responsabilidad, actitud, ilusión, constancia y esfuerzo. Para la preparación de esta receta comenzamos agregando en un bol la ilusión junto con la motivación. Ambos ingredientes pueden llegar a parecer iguales, pero no lo son. Lo cierto es que no son nada el uno sin el otro, por lo que hay que mezclarlos hasta conseguir que se liguen y que se conviertan en una sola masa.

Para esta receta, uno de los ingredientes protagonistas es la formación. Lo vamos añadiendo poco a poco desde el principio de la elaboración del plato y vamos uniéndolo con la constancia y el esfuerzo. Estos últimos ingredientes pueden parecer complicados de encontrar pero, con un poquito de paciencia, daréis con ellos y podremos lograr llevar a cabo esta maravillosa receta.

Una vez preparada la base con el ingrediente principal y sus potenciadores, sólo nos queda darle el último toque para que la receta quede perfectamente montada y podáis disfrutarla. Estos ingredientes son la responsabilidad y la actitud. Por ser los últimos no son menos importantes, ya que éstos, junto con los demás, son la clave para que esta receta pueda funcionar. En cuanto todo esto esté estructurado, el plato ya estaría listo para servir, disfrutar y repetir.

Esta receta me la enseñó Soulayman, un chico del DISL SAMU Huelva que ha descubierto el mundo de la cocina gracias a las prácticas formativas que realiza como ayudante de cocina en un restaurante de la ciudad. Desde que llegó al centro, estuvo formándose, al igual que sus compañeros, y, en cuanto vimos que el chico era responsable, atento y trabajador, decidimos ponernos manos a la obra y buscarle unas prácticas formativas en las que el joven pudiese aprender un oficio. Aunque, inicialmente, la cocina no estaba entre sus preferencias, el joven ha encontrado en los fogones la disciplina, la responsabilidad y las ganas de crecer como persona. Cada fin de semana, Soulayman nos enseña con mucha ilusión alguna receta que ha aprendido. El chico está muy agradecido y está disfrutando mucho de esta experiencia que lo está impulsando a madurar y a evolucionar como persona.

NOELIA GONZÁLEZ TOSCANO
Educadora del DISL SAMU Huelva

ONCE y SAMU fomentarán el empleo accesible para personas con discapacidad

SAMU y su fundación han firmado un convenio de colaboración con Fundación ONCE e ILUNION para fomentar la creación de empleo accesible a las personas con discapacidad. El objeto del acuerdo, suscrito a principios de septiembre en la sede de Fundación ONCE en Madrid, es establecer un marco general de colaboración entre Fundación ONCE, ILUNION, SAMU y Fundación SAMU en materia de empleo y formación para todas las personas y en especial aquellas con discapacidad. Las partes también colaborarán en materia de sostenibilidad, accesibilidad universal y desarrollo de iniciativas conjuntas en el ámbito de la economía social.

El vicepresidente ejecutivo de Fundación ONCE, Alberto Durán; el consejero delegado de ILUNION, Alejandro Oñoro; y el presidente de SAMU, Carlos González de Escalada, fueron los encargados de suscribir este acuerdo que también recoge el desarrollo de acciones de formación conjunta y el establecimiento de programas de captación, orientación e inserción laboral de todas las personas y en especial aquellas con discapacidad, con la finalidad de conseguir su acceso al empleo de calidad.
Las entidades firmantes podrán colaborar en iniciativas para la formación y contratación de trabajadores con discapacidad y jóvenes en situación de vulnerabilidad social. En el caso de Fundación ONCE lo haría a través de la Asociación Inserta Empleo, entidad especializada en la formación y búsqueda de empleo para personas con discapacidad. Estas actuaciones podrán ser susceptibles de cofinanciarse con el Fondo Social Europeo en el marco del Programa Operativo vigente.

En materia de accesibilidad universal, ambas partes colaborarán para la realización de actividades y para el fomento de iniciativas cuyo objeto sea la consecución del diseño y la accesibilidad universal para todas las personas con discapacidad. Así, se establecerá un programa de cooperación para la promoción del diseño y la accesibilidad universal para todas las personas, incluidos los espacios virtuales, en los edificios, instalaciones y servicios, poniendo el foco en la accesibilidad tecnológica. Se podrán realizar, igualmente, jornadas formativas en este ámbito.

Contrataciones con contenido social

Por otra parte, SAMU y su fundación promoverán con carácter general la incorporación de cláusulas de contenido social en la mayor parte de las contrataciones centrales que realice y estudiarán la posibilidad de formar parte del Foro para la Contratación Socialmente Responsable. Esta organización tiene como objetivo promover la inclusión de cláusulas de contenido social en la contratación tanto pública como privada que favorezcan al colectivo de las personas con discapacidad.
SAMU también podrá adquirir los productos y contratar los servicios que precise para sus actividades a los centros especiales de empleo creados en el seno de ILUNION.

Por último, el acuerdo establece que Fundación SAMU, Fundación ONCE e ILUNION trabajarán conjuntamente por el fomento de la innovación social también en el ámbito de la financiación inclusiva impulsando la formación y la creación de un ecosistema adecuado para promover las nuevas tendencias de financiación e inversión e impacto social de calidad.

Testimonio emocional del confinamiento

El sábado 14 de marzo de 2020 por la noche entró en vigor en España el primero de los estados de alarmas declarados por el Gobierno español como consecuencia de la pandemia del Covid-19 y que estableció una cuarentena nacional que supuso el confinamiento en sus casas de toda la población y la clausura de establecimientos no esenciales. El estado de alarma no finalizó hasta el 21 de junio. Durante todo este tiempo, a excepción de las últimas semanas, cuando se puso en marcha el plan de desescalada, la mayor parte de la población estuvo encerrada en sus hogares, entre ellos los numerosos menores de edad de los centros de acogida y los residentes de los diferentes centros especializados en la atención a personas con discapacidad de la Fundación SAMU. Durante meses, estas personas no pudieron ver a sus familiares, salvo por videollamada, y los profesionales de estos recursos se convirtieron en un apoyo incondicional para ellos, entre los que se encuentran personas en riesgo de exclusión social, personas migrantes, con discapacidad y/o en situación de dependencia.

Es en este complicado y excepcional periodo de tiempo cuando se tomaron las imágenes que se pueden apreciar en la exposición Fotografía en tiempos de confinamiento. Esta muestra, organizada por Fundación SAMU, a través de su área de Dependencia e Inclusión Social, y la colaboración de la Junta de Andalucía y el Ayuntamiento de Sevilla, se inauguró el 16 de septiembre en el Monasterio de San Jerónimo de Sevilla.

Exposición Exposición ‘Fotografía en tiempos de confinamiento’

Exposición ‘Fotografía en tiempos de confinamiento’

“Las personas con diversidad funcional han visto cómo su calidad de vida se ha deteriorado debido al período de confinamiento. Se detecta en ellos más vulnerabilidad emocional y un aumento de problemas de salud mental y comportamental”, según explican desde Fundación SAMU. Debido a toda esta situación, desde SAMU Idilio se impulsó la creación artística de talleres fotográficos.

Accesibilidad e inmediatez

“La fotografía tiene dos ventajas fundamentales: accesibilidad e inmediatez. Cualquier persona independientemente de su edad o de sus diversas capacidades, puede ser capaz de crear o trabajar con una imagen. Permite la expresión ante cualquier barrera o dificultad que presente y es una herramienta fácil, accesible y su resultado es visible de forma inmediata. Con la fotografía podemos crear una nueva forma de percibir y sentir, partiendo de la premisa de qué mostrar, darse cuenta, ser consciente y expresar quién eres, dónde estás, qué estás viviendo…”, señalan desde SAMU.

Así, a través de un móvil, los residentes de diferentes recursos de Fundación SAMU captaron diversos momentos de su día a día durante el confinamiento, así como sus sentimientos, pensamientos y emociones.

Los centros que participan en la muestra son la Residencia San Sebastián y la Residencia Santa Ana, ambos especializados en la atención a personas dependientes y con discapacidad, y 14 centros de menores extranjeros no acompañados: ISL Valencina, ISL Polanco, ISL Bornos, ISL Castillejo, PAI Jaén, ISL Serón Almería, ED Las Cabezas, PAI Motril, ISL Castillo de las Guardas, ISL Los Arcos, ISL SAMU Dúrcal, ISL Corteconcepción, ISL Alcalá, R.B Motril. La finalidad principal de esta exposición fotográfica es acercar a la población la realidad de estos colectivos desde su propia perspectiva en momentos de pandemia.

Dar voz a quienes no la tienen

“La exposición fotográfica busca como impacto social dar voz a aquellas personas que no la tienen, permitiendo la expresión a través de la imagen. Ellos, como protagonistas de esta historia, participan en una actividad que sirve de medio de trabajo cooperativo intercentros, para ello utilizan la cámara del móvil para expresarse y mostrar así cómo se sienten, pudiendo llegar a generar el debate entre la objetividad de la imagen versus la subjetividad de la mirada propia de quien realiza la foto”, apuntan desde la organización.

A la inauguración de la muestra, que tuvo lugar en el Monasterio de San Jerónimo de Sevilla, acudió Inmaculada Santisteban Serrano, directora general de Personas con Discapacidad de la Junta de Andalucía, además de diferentes representantes de la dirección de SAMU, como el doctor Carlos Álvarez Leiva, presidente de Honor de SAMU; José Antonio Trujillo, adjunto a la dirección general de SAMU; María José Tinoco, directora del área de Dependencia e Integración Social de SAMU; y Concepción Pérez, directora del área de Intervención Socioeducativa y de la Mujer, entre otros.

Después de su ubicación actual en el Monasterio de San Jerónimo, la exposición fotográfica se expondrá en los centros cívicos de Blas Infante, Alcosa y Torreblanca, todos ellos en Sevilla, durante octubre y noviembre, y culminará con una última muestra en el centro cívico Entreparques, a partir del 22 de enero de 2023.

Exposición Exposición Exposición ‘Fotografía en tiempos de confinamiento’

Exposición  ‘Fotografía en tiempos de confinamiento’