La Residencia San Sebastián disfruta del mar

Fundación SAMU ha puesto en marcha este verano una nueva edición del proyecto Disfrutamar, que promueve la mejora de la calidad de vida de las personas a través del deporte y la náutica. En esta ocasión, los primeros en disfrutar de la actividad fueron los usuarios con diversidad funcional de la Residencia San Sebastián (Cantillana, Sevilla).

El programa Disfrutamar fue inaugurado por Fundación SAMU el 23 de septiembre de 2017, gracias al apoyo de la Obra Social La Caixa. Esta iniciativa tiene como objetivo principal acercar el mar y las actividades náuticas a los residentes y usuarios de los diferentes servicios de la Fundación, principalmente personas con discapacidad intelectual, graves trastornos de conducta, daño cerebral sobrevenido, y menores migrantes o nacionales que se encuentran dentro del sistema de protección de la Junta de Andalucía.

Tras dos años de parón como consecuencia de la pandemia del coronavirus. Fundación SAMU recuperó esta actividad en 2022. Esta iniciativa innovadora se ha desarrollado nuevamente durante los veranos de 2023 y 2024, recuperando así el ritmo previo a la pandemia.

Lo que comenzó como una prueba dirigida a personas con discapacidad intelectual es hoy un proyecto consolidado. Gracias a este programa, los usuarios y residentes de prácticamente todos los recursos de SAMU ubicados en Andalucía de las áreas de Dependencia e Inclusión Social e Infancia y Familia han participado en alguna de las salidas marítimas efectuadas a través de Disfrutamar. El programa aprovecha las ventajas de la náutica para propiciar el desarrollo de vínculos personales e interpersonales y de habilidades de comunicación entre instructor, monitor de referencia y los mismos usuarios, siempre en un ambiente de dispersión y relajación.

El impacto social del programa Sevilla Integra

En los últimos nueve meses, el programa Sevilla Integra se ha consolidado como un proyecto emblemático de SAMU. Ha destacado por su impacto en la comunidad sevillana, en concreto en los distritos de Casco Antiguo, Triana y Los Remedios. Este programa, dedicado a la inclusión social y laboral de personas en situación de vulnerabilidad, ha demostrado ser una herramienta para mejorar la calidad de vida de sus beneficiarios y promover una sociedad más justa.

Sevilla Integra ha desarrollado iniciativas que abarcan desde la formación y capacitación laboral hasta el apoyo psicosocial y la mediación intercultural. Uno de los logros más notables del proyecto ha sido la implementación de talleres formativos en diversas áreas como la administración, el comercio y la ayuda a domicilio. Estas formaciones no solo han proporcionado habilidades técnicas a los participantes, sino que también han reforzado su autoestima y confianza, elementos clave para la integración de estas personas en el mercado laboral.

Sevilla Integra ha atendido a cerca de 500 personas durante estos nueve meses. El 60% de los participantes encuentran empleo o continúan su formación en programas más avanzados. Este éxito se debe en gran medida a la colaboración con empresas locales y nacionales que han ofertado prácticas profesionales y oportunidades laborales a los beneficiarios del programa.

Fundación SAMU, comprometida con la innovación social, ha implementado un sistema de evaluación para medir el impacto del programa y adaptarlo a las necesidades emergentes de la población. Este enfoque dinámico ha permitido a Sevilla Integra mejorar su metodología y ampliar su alcance para que cada vez más personas puedan beneficiarse de sus recursos y servicios.

La consejera andaluza Loles López visita el DISL SAMU Huelva

El centro de acogida de menores DISL SAMU Huelva recibió el 12 de julio la visita de la consejera de Inclusión Social, Juventud, Familias e Igualdad de la Junta de Andalucía, Loles López Gabarro. España está viviendo en la actualidad una nueva crisis migratoria y, con esta visita, se pretendía mostrar a la sociedad una realidad optimista y positiva del trabajo que se realiza en los centros de protección de menores.

Las autoridades realizaron un recorrido por las instalaciones del recurso junto con el equipo de profesionales del DISL SAMU Huelva, y tras esto, se reunieron con algunos de los menores acogidos y que se encontraban en el centro en el momento de la visita. Además de Loles López, también acudieron al centro Ramón Rodríguez, responsable del Observatorio de Infancia y Familia; Francisco Mora, director general de Infancia, Adolescencia y Juventud de la Junta de Andalucía; y José Manuel Borrero, delegado de Inclusión Social de la Junta de Andalucía en Huelva, entre otras personas.

“Nuestros chicos son muy alegres y agradecidos, por lo que no dudaron en abrir las puertas de lo que ellos ahora llaman hogar para recibir una visita tan importante. Se mostraron tranquilos y confiados en todo momento e, incluso, hubo tiempo para sacar las raquetas de pin pon y echar un partido con el director general de Infancia, Adolescencia y Juventud, Francisco Mora, entre risas”, cuenta Cristina Mora, directora de DISL SAMU Huelva. “En cuanto a las autoridades, la impresión que se llevaron, según nos han referido y nos han hecho saber, fue muy grata. Las instalaciones del recurso son maravillosas y se trabaja para hacer de estas instalaciones una familia, casa y hogar, con todo lo que esto supone. También pusieron en valor el trabajo de todos los profesionales que conforman el DISL SAMU Huelva”.

Actualmente, en este centro conviven 11 menores de diferente edades y nacionalidades que comparten un mismo objetivo: futuro. El perfil de los menores acogidos en el DISL SAMU Huelva actualmente es bastante variado. El rango de edad varía desde los 15 a los 18 años, momento en el que son derivados a recursos externos tras su mayoría de edad, en los cuales se sigue trabajando con ellos su inserción sociolaboral y su situación documental.

En cuanto a la procedencia, en la mayoría de los casos son menores cuyo país de origen se enmarca en el África Subsahariana, sobre todo Gambia y Senegal. Otra parte de los menores acogidos provienen de Marruecos y Argelia. Aunque esta es la situación actual, no siempre ha sido así. A lo largo de estos años, en este recurso la procedencia que siempre ha destacado en número de menores acogidos ha sido la marroquí.

“La situación familiar y recursos en el país de origen también varía bastante de unos menores a otros. Nos encontramos desde menores que buscan con ayuda de sus familias un futuro más próspero hasta menores en situación de orfandad. Esto se relaciona directamente con la necesidad imperante de trabajar con ellos en base a la salud mental”, señala Cristina Mora.

El objetivo principal y el gran reto de los profesionales de los centros de menores gestionados por Fundación SAMU es dotar a los chicos y chicas de habilidades y recursos personales, así como emocionales, para su autonomía e inserción sociolaboral en nuestro contexto social y geográfico. “En concreto, el recurso DISL SAMU Huelva, por sus dimensiones en todos los niveles, nos permite ofrecer a los menores un acompañamiento personalizado, no sólo adentrándonos y conociendo su pasado, sino también trabajando y ayudándoles a construir su futuro. Sus logros también nos suman a nivel profesional y personal por supuesto, y nos reafirman en la importancia de nuestra misión”, continúa Cristina Mora.

“Diría que trabajamos continuamente con el objetivo de proporcionar un entorno seguro y acogedor a los menores, donde se puedan desarrollar tanto de manera personal, emocional y educativa para facilitar y conseguir la integración de estos en la sociedad. Además, se fomenta la participación activa de los menores en su propio desarrollo. Razones de ser tenemos tantas como logros y objetivos conseguidos, y por supuesto todo lo que aún nos queda por conseguir. Nuestra misión siempre está vinculada al aprendizaje. Que los menores sean capaces de obtener el título de Educación Secundaria Obligatoria después de muchos meses de esfuerzo y constancia por todas las partes es una de nuestras razones de ser. Que los menores sean capaces de aprender y hablar con fluidez el idioma de país de acogida en pocos meses es otra de nuestras razones de ser. Que los menores se inserten en el mundo laboral es otra de nuestras razones de ser”.

El equipo que conforma el DISL SAMU Huelva consta de ocho profesionales que trabajan de forma interdisciplinar: educadores, trabajadores sociales, psicólogos y mediadores e intérpretes. Además, el equipo cuenta con la delegada provincial del área de Infancia y Familia de Fundación, SAMU, guía y faro en todo este proceso.

“Si tuviese que destacar algo de este gran equipo sería su entrega. Todos están comprometidos y comprometidas por el bienestar de los menores a todos los niveles y que trabajan de manera colaborativa para ello. Nuestro enfoque, centrado en los menores, adapta las herramientas profesionales a las necesidades individuales en todos los planos de la persona: emocional, social, cognitivo… En este tipo de profesiones con tanta carga emocional, el compañerismo y el poder compartir es muy importante”, señala la directora del DISL SAMU Huelva.

También me gusta resaltar siempre que, además de los profesionales directos, nuestro trabajo no tendría sentido sin este contexto y enclave de la ciudad de Huelva, ciudad en la que su gente también les brinda a los menores respeto, acogida, empatía y oportunidades. No puedo olvidarme llegados a este punto de las entidades externas con las que nos coordinamos y trabajamos y a las cuales son derivados los menores, ampliando así sus redes de apoyo”. continúa Cristina Mora.

Más de 740 menores atendidos hasta julio

Desde enero hasta julio de 2024, Fundación SAMU ha atendido en Andalucía a 746 menores de edad, la mayoría de ellos en la provincia de Cádiz (437).

SAMU cuenta en la actualidad con 21 recursos en Andalucía especializados en la atención a menores, la gran mayoría de ellos jóvenes que llegan a España de manera irregular.

Por provincias, Cádiz es la que más recursos tiene abiertos (8), por los que han pasado 437 menores desde que comenzó el año. Le sigue la provincia de Sevilla con 7 recursos y 153 menores. En Granada, SAMU tiene activos tres dispositivos (uno en Dúrcal y dos en Motril), por los que han pasado en estos siete meses 67 jóvenes. En Córdoba hay dos centros, que se ubican en Lucena y Moriles, de los cuales se han beneficiado 45 menores en este tiempo; un centro en Huelva (26 menores) y un centro en Almería (18 jóvenes).

El primer contacto que SAMU tuvo con menores migrantes no acompañados fue en 2007. Aquel año, la organización respondió de manera inmediata a la llamada de emergencia de la Junta de Andalucía ante la llegada masiva de migrantes a las costas de la región, muchos de ellos menores de edad. Diecisiete años después, Fundación SAMU es uno de los principales operadores globales en la atención a menores en acogimiento residencial y acogidas de emergencia. Los objetivos del área de Infancia y Familia han ido creciendo para dar respuesta a cada una de las necesidades de los menores migrantes y los extutelados con nuevos programas de mayoría de edad y siempre con la mirada puesta en una misma línea de actuación: lograr la plena inclusión, autonomía y emancipación de estos jóvenes en la sociedad.

Café mundial de la mano de Fundación SAMU para movilizar conciencias

En un esfuerzo por sensibilizar sobre las realidades y desafíos a los que se enfrentan las personas con discapacidad a nivel mundial, se han llevado a cabo recientemente dos eventos educativos en Villafranca de los Caballeros (Toledo) y Herencia (Ciudad Real) dentro del la línea de trabajo de Educación para el Desarrollo y la Ciudadanía Global que Fundación SAMU impulsa.

El primero de estos dos eventos, titulado Café mundial: discapacidad sin fronteras, se celebró en la Casa de la Cultura Juan Calderón de Villafranca de los Caballeros. Al acto asistieron unas 30 personas, que, al hilo de un café en torno a una mesa, compartieron un espacio de diálogo y reflexión sobre las diferentes realidades que viven las personas con discapacidad en diversas latitudes. El acto contó con la presencia del alcalde del municipio, Julián Bolaños, además de miembros de organizaciones locales y vecinos del municipio.

Estas actividades de sensibilización también se desarrollaron en el Instituto de Educación Secundaria Hermógenes Rodríguez, de Herencia, donde más de 50 estudiantes participaron en una jornada diseñada para concienciar sobre la vulneración de los derechos de las personas con discapacidad de todo el mundo.

El alumnado de 4º de ESO participó en una charla en la que, a partir del cortometraje El Gran Zambini, abordaron temas como la discriminación, los derechos humanos y las historias de vida de personas con discapacidad.

Los participantes de ambas actividades debatieron sobre asuntos como la accesibilidad, la inclusión laboral y social, y las políticas públicas que afectan a las personas con discapacidad. Durante el evento se compartieron experiencias inspiradoras de personas con discapacidad que han superado diferentes barreras y han logrado un impacto significativo en sus comunidades. También se debatió sobre las maneras en las que la sociedad puede trabajar en conjunto para crear un entorno más inclusivo y accesible para todos. La interacción y el intercambio de ideas fueron enriquecedores, promoviendo un mayor entendimiento y empatía hacia las personas con discapacidad.

En esta iniciativa también participaron de manera activa usuarios de la Residencia Santa Teresa, centro de Fundación SAMU especializado en la atención a personas con discapacidad en Villafranca de los Caballeros. Su directora y delegada de Fundación SAMU en Castilla La Mancha, María de Jesús Tajuelo, y usuarios del centro compartieron sus experiencias personales y los retos a los que se enfrentan diariamente, aportando una visión única y enriquecedora a las discusiones.

Por otro lado, el testimonio de Sonia Oliver, concejala de Villafranca de los Caballeros, quien participó en actividades de empoderamiento de cuidadoras de personas con discapacidad en Marruecos y pudo ver personalmente las situaciones a las que éstas se enfrentan, fue clave para entender la importancia de la inclusión y la accesibilidad en todas las áreas de la sociedad.

Estas actividades no solo brindaron a los estudiantes y a la ciudadanos en general que participaron en estos eventos una comprensión más profunda de las dificultades a las que se enfrentan las personas con discapacidad, sino que también fomentaron un espíritu de solidaridad y responsabilidad social.

El éxito e interés que despiertan estas actividades resaltan la necesidad continua de iniciativas educativas que promuevan la inclusión y la equidad. Fundación SAMU agradece a todos los participantes, voluntarios y colaboradores su enorme implicación, y reitera su compromiso de seguir trabajando por un mundo donde las personas con discapacidad tengan igualdad de oportunidades y derechos.

Los socios de Fundación SAMU en cooperación internacional

Fundación SAMU, a través del área de Cooperación Internacional y Acción Humanitaria, celebró el 27 de junio la reunión anual de directores y directoras de las organizaciones locales con las que la entidad trabaja sobre el terreno en los diferentes proyectos de cooperación que tiene en marcha en todo el mundo. Durante la reunión se estableció el propósito de compartir ideas sobre la estrategia de Fundación SAMU y se dieron a conocer las prioridades de cada organización para el año 2025.

Roxana Pintado, coordinadora del área de Cooperación Internacional de Fundación SAMU, presentó la labor de la organización en la cooperación internacional y el desarrollo, resaltando la presencia de la organización en varios países y su enfoque en la ayuda humanitaria. También se presentó la estrategia de cooperación internacional de Fundación SAMU, que se basa en cuatro objetivos estratégicos principales que incluyen el fortalecimiento institucional, el aumento del impacto de los proyectos, la ampliación de fuentes de financiamiento y la sensibilización de la sociedad. También destaca los sectores de acción prioritarios y las áreas geográficas de enfoque para la cooperación internacional.

Además, se proporcionaron detalles sobre la aprobación y captación de fondos de proyectos gestionados por el departamento de Cooperación Internacional de Fundación SAMU. En este sentido, destaca que en 2023 se aprobaron un 42% más de proyectos con respecto al año anterior. También se presentó la estrategia de cooperación para el desarrollo y la ciudadanía global, enfocada en la comprensión del mundo globalizado, la actitud crítica, el compromiso en la lucha contra la pobreza y los valores ciudadanos en España.

En la reunión estuvieron presentes los máximos representantes de Agroverde, Asociación Alkaram, Asociación Hanane, Asociación Tadamon, Caritas Coroico, Centro de Iniciativas para el Desarrollo, Corporación Infancia y Desarrollo, Fundación Alirio Henao – Hogar San José, Fundación ATIL, Fundación Alto Atlas, Fundación Pies Descalzos, Global Development Community Burundi y Fundación SAMU. Todas estas organizaciones locales expusieron sus estrategias, perspectivas y expectativas para los años 2024 y 2025.

Una oportunidad real para las personas sin hogar en SAMU

El Programa de Inserción Social y Laboral para Personas sin Hogar en Andalucía, financiado por la Comisión Europea y la Junta de Andalucía, cumple un año de vida. Fundación SAMU es la organización encargada de gestionar este recurso en las provincias de Córdoba, Sevilla, Huelva y Cádiz, y en su primer año de ejecución ha obtenido unos datos exitosos.

La I Estrategia de Atención a Personas Sin Hogar en Andalucía 2023-2026 ha puesto el foco de atención en las alarmantes cifras de personas que se encuentran en situación de sinhogarismo, algo que afecta a personas de distintos perfiles y que, por diferentes causas, se han visto obligadas a pernoctar en la calle o a hacer uso de recursos o dispositivos específicos.

El Programa de Inserción Social y Laboral para Personas Sin Hogar en Andalucía desarrolla, a través de un equipo técnico multidisciplinar, itinerarios personalizados de inserción con una atención individualizada e integral que cubre todas las necesidades de manutención y alojamiento, así como las necesidades básicas y específicas, al mismo tiempo que trabaja para lograr la inserción social y laboral de las personas sin hogar que se benefician de este proyecto.

Durante el primer año de ejecución del programa por parte de Fundación SAMU, se han atendido a 102 personas, de las cuales 60 han logrado su inserción laboral y 40 han accedido a formaciones que han mejorado su empleabilidad. En total se han contabilizado más de 5.700 actuaciones que han permitido regular la situación administrativa de las personas beneficiarias, acceder a recursos y prestaciones y alcanzar habilidades sociolaborales y de la vida cotidiana.

Estas cifras muestran cómo personas que carecían de un hogar y de los recursos personales, sociales y económicos necesarios para llevar una vida independiente han vuelto al mercado laboral y presentan una notable mejora de las habilidades sociales y personales para el desarrollo de una vida autónoma.

También hay que destacar el uso del trabajo en red y en coordinación que mantiene Fundación SAMU con las diferentes entidades implicadas, lo que permite enriquecer la praxis y optimizar los recursos.

Mohamed y Karim, los héroes de El Chorrillo

Karim Benaboura y Mohamed Kharbach pasaban la tarde del 27 de mayo en la playa de El Chorrillo, en Ceuta, junto a otros compañeros mientras, allí en el mar, junto al segundo espigón, tres chicos disfrutaban de un baño. La plácida escena, habitual de un día de inicio de verano en las playas de la ciudad, se llenó de angustia y nervios cuando uno de los nadadores empezó a mostrar dificultades para mantenerse a flote. Se ahogaba, mientras los gritos de alerta y la confusión se sucedían en la arena. Entonces, Mohamed se lanzó al agua, seguido de Karim, y entre ambos consiguieron alcanzar al joven ceutí en peligro.

En la orilla, Samra Hajjaj, auxiliar técnico educativo del centro Aljarafe, en la zona de Piniers, que acoge a estos dos menores marroquíes, intentaba tranquilizar a su equipo y también a los amigos del joven de 16 años vecino de la ciudad. Mohamed y Karim habían logrado salvarle la vida. Poco después, los servicios de emergencia llegaron al lugar de los hechos.

“No tuvimos miedo. Tranquilos, tranquilos”, explicaban unas horas más tarde a un equipo de periodista de Ceuta TV ambos, sonrientes, algo tímidos ante la cámara, con su español aún en fase de aprendizaje. “Son dos chicos muy generosos, siempre dispuestos a ayudar. Residentes ejemplares”, añadía Samra Hajjaj.

Podemos desvelar esta pequeña historia de dos héroes anónimos a través del retrato de ambos jóvenes, realizado por la responsable del centro Aljarafe Ceuta, María Jesús Contreras.

Karim Benaboura es un chico natural de Oued Lao (Marruecos). Su pasión es el deporte y su máxima aspiración, ser futbolista profesional. Decidido, maduro y responsable, él mismo contactó insistentemente con el periódico local hasta que consiguió que le entrevistarán para contar su historia y así poder buscar ayuda para ser futbolista. “Su comportamiento es excelente. Es educado, cuidadoso con sus cosas y muy preocupado e implicado en su futuro”, describe María Jesús Contreras, responsable del centro Aljarafe Ceuta.

Mohamed Kharbach, por su parte, nació en Tetuán (Marruecos). Según relata María Jesús Contreras, es un chico muy educado y amable. Tiene formación de peluquero y barbero en su país, oficio en el que quiere seguir formándose y que aspira a desempeñar de manera profesional en un futuro.

Mohamed es noble, sensible y familiar. “Suele mostrar dualidad de sentimientos: por un lado quiere prosperar y sabe que en su país no lo va a conseguir; por otro lado, echa muchísimo de menos a su madre, por la que siente devoción. Siempre saca fuerzas de la relación tan cercana con el equipo educativo de Aljarafe para ir superando los días lejos de los suyos hasta poder conseguir sus objetivos vitales”, apunta Contreras.

Fundación SAMU tiene el encargo del Área de Menores de la Ciudad Autónoma de Ceuta de la gestión de la emergencia que supone la entrada de menores migrantes no acompañados por un referente adulto por la frontera con Marruecos.

Para ello, la fundación ha puesto a disposición del Área de Menores tres centros, dos de acogida inmediata y un centro de Inserción Sociolaboral, tal y como explica Siham Khalifa, subdirectora del Área de Infancia y Familia.

El centro de Nueva Esperanza tiene capacidad para la atención de 60 menores de edad. Es el centro de recepción diseñado para atender las necesidades básicas de los menores y asegurar su bienestar. “Nuestro objetivo es proporcionar un entorno seguro y adecuado para la primera acogida de un menor de edad sin acompañamiento de un referente adulto”, señala Siham Khalifa.

Apoyo psicológico

El centro Aljarafe, con una capacidad para la atención de 60 menores y donde residen Karim Benaboura y Mohamed Kharbach , da continuidad al trabajo realizado en el centro de recepción. Aquí se pone el foco en el apoyo psicológico que ayuda a los menores a afrontar el trauma y el estrés derivado de su situación migratoria.

Por último, el centro de Inserción Sociolaboral ISL Triana, con una capacidad para la atención de 36 menores, tiene el objeto de diseñar itinerarios personalizados de inserción de cara a la transición a la vida independiente de los menores acogidos, una vez cumplida la mayoría de edad. “Su meta es la formación y capacitación a través de programas que preparen a los menores para una vida independiente y autosuficiente”, añade la subdirectora del área.

Uno de los pilares de la atención a menores migrantes por parte de Fundación SAMU es el acceso a la educación formal e informal, incluyendo clases de idioma del país de acogida, e implementando programas que promuevan la integración cultural y social de los menores en la comunidad local.
Todos los centros gestionados por Fundación SAMU trabajan en coordinación y colaboración con otras instituciones públicas y organizaciones, tanto gubernamentales como no gubernamentales, para asegurar una atención integral y efectiva de estos menores.

Emplea Sevilla Integra llega a más de 400 personas

El proyecto de inserción laboral Emplea Sevilla Integra cumple seis meses en funcionamiento. Esta iniciativa, desarrollada por Fundación SAMU en el Casco Antiguo de Sevilla con la cofinanciación del Ayuntamiento de la ciudad, tiene como objetivo principal facilitar la inserción sociolaboral de personas en riesgo de exclusión social y a mejorar las posibilidades de incorporación al mercado de trabajo mediante la realización de itinerarios personalizados de inserción. En concreto, Fundación SAMU atiende a personas empadronadas en los distritos de Casco Antiguo, Triana y Los Remedios, y ofrece sus servicios en la calle Juan de Pineda, 112.

Entre las diferentes líneas de actuación de este programa destacan las competencias técnicas como formaciones específicas, intermediación laboral y prácticas profesionales en empresas. Estas acciones permiten ofrecer a las personas participantes un acompañamiento adaptado a sus necesidades sociolaborales que faciliten su inserción en el mercado laboral.

En estos seis meses, Fundación SAMU ha logrado sensibilizar a más de 400 personas, alcanzando así más del 50% de los objetivos establecidos por el Ayuntamiento de Sevilla en el marco de la Convocatoria de subvenciones Sevilla Integra 2023-2024.

Para promover la inserción laboral con plenas garantías, Fundación SAMU ha realizado diversas formaciones técnicas, como por ejemplo de atención al público, logística, mozo de almacén, atención sociosanitaria y/o auxiliar de administración. En total, desde noviembre, 85 personas se han beneficiado ya de estas formaciones.

“Aunque queda aún mucho camino por recorrer, desde Fundación SAMU seguimos apostando por el trabajo en red con diferentes entidades, la plena inclusión de los colectivos que atendemos y la igualdad de oportunidades”, apuntan desde el área de Dependencia e Inclusión Social de Fundación SAMU.

En total, diez entidades, entre ellas Fundación SAMU, firmaron el pasado 9 de noviembre con el Consistorio de Sevilla los convenios pertinentes para el desarrollo del programa Sevilla Integra 2023-24. A través de esta firma, el Ayuntamiento de Sevilla se comprometía a aportar 4,35 millones de euros par promover la integración laboral.

El programa Sevilla Integra 2023-24 es un servicio público y se está llevando a cabo en todos los distritos, aunque centra sus esfuerzos en los barrios de atención preferente, donde la inserción laboral es más difícil. Las entidades participantes y las zonas en las que actuarán son: Aforcade (distrito Norte); Persán (distrito Macarena, Polígono Norte-El Vacie y El Cerezo); Asociación Paz y Bien (Sevilla Este y Parque Alcosa); ADE (Torreblanca); Fundación Randstad (El Cerro del Águila y Palmete-Padre Pío-La Plata); Acción Laboral (resto del distrito Cerro-Amate, incluido Tres Barrios); Fundación Don Bosco (Polígono Sur); Fundomar (resto del distrito Sur y distrito Bellavista-La Palmera); Fundación SAMU (Casco Antiguo, Triana y Los Remedios); y Nortempo (distritos Nervión y San Pablo Santa Justa).

Para participar en este programa de empleo, las personas interesadas deben estar desempleadas o con un contrato parcial de menos del 50% de la jornada laboral establecida en su convenio colectivo y que, por diversas circunstancias económicas, sociales, familiares y personales presenten mayor vulnerabilidad social y, por tanto, tienen más dificultad de inserción.

También deben estar empadronados en la ciudad de Sevilla durante todo el tiempo que dure su participación en el programa. Y tener la edad legalmente establecida para trabajar en España, según la normativa vigente en el Estatuto de los Trabajadores.

T-Acompañamos: empleo e inclusión en Huelva

Fundación SAMU, en su filosofía por ayudar a colectivos vulnerables, puso en marcha a principios de año en Huelva el proyecto T-Acompañamos, un programa de proyectos integrales para la inserción laboral. La iniciativa está cofinanciada por el Fondo Social Europeo y el Servicio Andaluz de Empleo, dependiente de la Consejería de Empleo de la Junta de Andalucía.

El objetivo es lograr una mejora de la empleabilidad y la inserción laboral de personas pertenecientes a los colectivos vulnerables que residen en Andalucía. Para ello, se han articulado una serie de actuaciones como la orientación laboral y la formación para la adquisición de conocimientos técnicos y mejora de las competencias laborales, así como acciones de intermediación e inserción.

Desde el 20 de mayo, la sede de Fundación SAMU en Huelva está desarrollando la acción formativa Auxiliar de Ayuda a Domicilio. Son los profesionales en atención sociosanitaria de SAMU los encargados de impartir esta formación, dirigida a la adquisición de los conocimientos para una correcta intervención y atención sociosanitaria a personas dependientes en su domicilio.

Los alumnos de este programa acudieron el 31 de mayo a la Escuela de Oficios de SAMU, en Gelves (Sevilla), donde conocieron las instalaciones y recibieron una formación en el manejo de una grúa de atención domiciliaria a personas dependientes. Fue una jornada muy productiva.

El equipo técnico de Huelva ha logrado implicar en esta acción a Macrosad, empresa de prestación de servicios de ayuda a domicilio. Esta entidad impartió una charla informativa al alumnado sobre el funcionamiento de las empresas del sector e informó sobre la apertura de una bolsa de empleo específica para las personas participantes en esta formación.

Con este proyecto, Fundación SAMU desembarca en Huelva en el ámbito del empleo con el final objeto de ampliar su campo de acción a la inserción sociolaboral de personas pertenecientes a colectivos vulnerables y continuar creciendo como entidad con vocación de utilidad pública.

Laura G. Rebolo: “La protección a la infancia es mi estilo de vida”

Laura García Rebolo (Minas de Riotinto, Huelva, 1974) comenzó a trabajar en Fundación SAMU hace tres años. Hoy es directora del CPM Conflicto Social Sanlúcar la Mayor, tiene funciones de dirección técnica de calidad en el Área de Infancia y Familia de SAMU y coordina el proyecto Erasmus+ K2 Languages of Welcome.

—¿Cuándo comenzó a trabajar en Fundación SAMU?
—Fui subrogada hace tres años. Provenía de una entidad que yo misma había fundado junto con unos compañeros cuando estaba en la facultad. En ella comencé mi trayectoria profesional en el año 1995 como educadora y terminé siendo vicepresidenta y coordinadora general de todos los proyectos de la entidad.

—¿Cómo ha sido su evolución dentro de la organización?
—Yo la definiría como serpenteante. Cuando llegué a SAMU perdí toda mi categoría profesional y tuve que comenzar desde cero con 47 años como educadora en el turno de noche. Me he tenido que esforzar mucho para demostrar mi experiencia y valía en una macro organización donde no me conocía nadie. Todavía lo hago a día de hoy.

—¿Cuáles son sus funciones actuales dentro de SAMU?
—Actualmente soy la directora del Centro para Menores en Conflicto Social Sanlúcar la Mayor, en la provincia de Sevilla, pero también tengo funciones de dirección técnica de calidad en el Área de Infancia y Familia de Fundación SAMU, coordiné el proyecto de educación para el desarrollo El Cerezo y ahora coordino el proyecto Erasmus+ K2 Languages of Welcome. Eventualmente, cocino y pinto habitaciones. Pero lo que más me gusta es poner a gente en contacto, establecer vínculos y colaboraciones, como por ejemplo con Red Pencil Internacional en Bruselas o con la Fundación Enmmanuelle en Italia.

—¿Cómo se organiza para poder estar al frente de tantos proyectos?
—No sabría contestar bien a esta pregunta. Digamos que mi cerebro es lo suficientemente neurodivergente como para concentrarme aunque caigan morteros sobre el cabecero de mi cama al mismo tiempo que me intereso por las 95 lunas de Júpiter.

—¿Cómo es su día a día con los chicos del centro de menores que dirige?
—Soy pedagoga de vocación y de formación y siempre he sostenido que con la represión se consiguen muchas cosas, pero con el afecto se consiguen muchas más. Firmeza y amor, ese ha sido siempre mi lema y con él moriré en las trincheras. Desde muy pequeña, en mi comunidad religiosa, aprendí que la entrega al prójimo es la base de la transformación. No soy amiga de la caridad, prefiero la justicia y la solidaridad. La protección a la infancia es mi estilo de vida. Los que están cerca de mí lo saben. Y esto solo se consigue estando cerca y disponible. Algunos me regañan porque soy un sí a todo, pero lo cierto es que, cuando esté muerta, ya nada podré hacer. Hacer es mi palabra favorita. Hagámoslo posible, una construcción gramatical perfecta.

—¿Qué es lo que más le gusta del contacto directo con estos chicos?
—Este trabajo es bidireccional. Te enseña, se aprende cada día de ellos. Se aprende mucho de este mundo hostil y bello al mismo tiempo. Creo que lo que más me gusta del trabajo con los niños y niñas que están en situación de desprotección es haberme convertido en una persona con conciencia, no solo con conciencia social, sino también con conciencia de mí misma, de lo afortunada que soy de ser una mujer blanca en Occidente que genera plusvalía y que jamás ha hipotecado su emancipación. Soy una privilegiada y me debo a mi profesión de fe.

—¿Cuáles son las principales dificultades a las que se enfrenta en el centro para menores en conflicto social?
—El dolor ajeno, en primer lugar. Las personas que estamos muy cerca de niños y niñas altamente traumatizados, con historias de vida que ni los libros son capaces de contar, estamos expuestos a unas dosis altísimas de dolor por ósmosis y, ante eso, tienes dos opciones, o sucumbes o te haces fuerte. Fuerte por ellos. A mí, incluso, me ha enseñado a ser mejor madre, mejor compañera. Luego aparecen las dificultades estructurales, la administración y su burocracia, los recursos materiales y humanos. No hay que restarle importancia a lo complicado que es eso de gestionar también.

—Además de directora de un centro de menores, también coordina el proyecto europeo K2 Languages of Welcome. ¿Cómo se embarcó en este proyecto y por qué?
—Primero le contestaré al por qué: porque si yo me quedo quietecita reviento por un ojo. Es así desde que soy pequeñita. Luego le diré que soy amante de los pequeños proyectos, los que dan vida, los que te hacen estar muy cerca de un grupo pequeño de personas y te sientes útil y al mismo tiempo feliz. Esos proyectos te vinculan con personas de diferentes condiciones, religiones, ideologías. Y eso es bien. El proyecto Languages of Welcome se me ocurrió cuando coordinaba el recurso de inserción sociolaboral para jóvenes de SAMU DISL Alcalá. Allí todos son muy jóvenes y entusiastas, unos compañeros maravillosos. Yo tengo muchos contactos. Después de tantos años en la intervención social, siempre he dicho que mis ejércitos son enormes. Solo tuve que escribir un par de emails, conseguir la aprobación de la dirección del área de Infancia y Familia de SAMU y voilá… nos vimos en Italia con personas de Grecia, Portugal, Irán, Colombia, Argentina, México. Y nos trajimos muchos contactos para Fundación SAMU.

—¿Cuál es el objetivo principal de este proyecto?
—Hace años que la Comisión Europea tiene un enfoque centrado en la integración cívica. No podemos seguir formando guetos de personas migrantes en la vieja Europa. La integración total es la única salida para que no estallen rivalidades o problemas interculturales que se puedan llegar a enquistar como ha ocurrido tantas veces. Languages of Welcome constituye un espacio de construcción de herramientas y estrategias para facilitar la integración de personas migrantes desde un enfoque innovador que pone el énfasis en la creación artística, el lenguaje del cuerpo y del alma, el teatro social, la expresión a través del arte para facilitar la incorporación de las personas a nuevos contextos existenciales y donde deben formar parte de la comunidad con garantías de éxito.

—¿Por qué Fundación SAMU decidió participar en este proyecto junto a socios de otros países?
—Las iniciativas K2 están relacionadas con el intercambio de buenas prácticas. Mediterráneo norte y frontera sur tienen muchas cosas en común y distintos lenguajes que se deben interconectar para construir un corpus integrado de intervención. No hay mucha diferencia entre Lampedusa y Algeciras cuando se trata de abordar a la persona que migra, pero si no compartimos esos saberes, seguiremos siendo francotiradores. A mí esto último se me da bien, puedo ser certera, pero en equipo se consigue mucho más. Languages of Welcome culminará con un Manual de Buenas Prácticas Internacional. Esto es todo un reto y un gran éxito que genera corpus de conocimiento colectivo.

—¿Por qué es importante un intercambio de buenas prácticas a gran escala?
—Porque la colaboración es la única esperanza que nos queda. A nuestros hijos pequeños solemos decirles: si solo no puedes, con amigos, sí. Todos conocemos la teoría darwiniana de la selección natural, pero muchos desconocen los estudios de Peter Kropotkin sobre el apoyo mutuo. Realmente, las especies que sobreviven son aquellas que colaboran entre ellas. La colaboración es la base de mi enfoque en la intervención social, y con mucho amor, aunque algunos se rían de esto último.

—¿Cuáles son los principales retos a los que se ha enfrentado dentro de este proyecto internacional?
—Es un proyecto pequeño, tiene poco presupuesto, requiere que todos los agentes de Fundación SAMU le pongan mucho cariño e intención porque no es precisamente la gallina de los huevos de oro. Pero, visto a largo plazo, esta iniciativa engloba un montón de proyectos futuros mucho más rentables y relevantes. Me siento afortunada en ese sentido. Los compañeros de Fundación SAMU de otras áreas me abren los brazos. Somos un equipo pequeño constituido por cinco personas, y entre los cinco tenemos que hacer magia. Pues la hacemos, y nos reímos. La risa que no se pierda nunca, por favor.